El día en el que el presidente del Gobierno tuvo que rendir cuentas sobre los casos de corrupción de su partido, los políticos del Ayuntamiento de Huelva echaron una buena ‘peoná’, como se dice en Andalucía. Más de diez horas de extensos debates y de rifirrafes de patio de colegio, utilizando en ocasiones un lenguaje cuartelero.
El Recreativo de Huelva y la economía municipal centraron la atención de la última sesión plenaria antes de las vacaciones de verano.
Y no es para menos. Los onubenses se harán cargo de las deudas de un club de fútbol. El Ayuntamiento capitalino hará frente a los primeros pagos de la deuda contraída por el Decano con la Seguridad Social, que ascienden a 350.000 euros y que se deben abonar este año: 290.000 euros de una primera cuota inaplazable, y el resto para las distintas cuotas pactadas hasta el 31 de diciembre.
El importe total asciende a 1,8 millones de euros, de modo que en 2018 habría que incluir en los presupuestos del Consistorio una partida para hacer frente a las necesidades de pago del Recre.
Este escenario podría darse si el Ayuntamiento no saca a la venta el club onubense antes del 31 de diciembre. Eso sí, según el alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, “el compromiso es el de transmitir las acciones”. Sin fechas y sin prisas, y teniendo “siempre presente que todo lo que se anticipe se pedirá en el próximo pliego de condiciones para la venta del Decano”.
Y todo viene por la propuesta de modificación presupuestaria del equipo de Gobierno para sacar esos 350.000 euros del Fondo de Contingencia, para pagar a la Seguridad Social. Esta iniciativa fue respaldada por PP, Ciudadanos, Mesa de la Ría y los dos concejales no adscritos, y votada en contra por Izquierda Unida y Participa Huelva.
Un jaleo. Parte de la oposición entró en colera por este hecho. Al portavoz de Participa Huelva, Jesús Amador, le pareció un “movimiento electoralista” del alcalde y propuso que se preguntara a la ciudadanía si quiere pagar o no las deudas del Recre. Y no quedó aquí. El portavoz de IU, Pedro Jiménez, dijo aquello de “vamos a hacer bueno a Perico -exalcalde de Huelva-”, a lo que Gabriel Cruz no le supone “ningún decoro”.
Entre todo esto, el edil socialista José Fernández calificó a Amador de “pitoniso” por “creer que el Ayuntamiento va a pagar todas las deudas del Recre” y, ante las críticas de falta de transparencia del equipo de Gobierno, con ironía, puso de ejemplo de Consistorio sin opacidad al de Cádiz -actualmente gobernado por Podemos-. Además, Fernández acusó a IU de “no posicionarse con el Recre” porque a Pedro Jiménez “le pide el cuerpo que el Decano hubiera desaparecido hace más de un año”.
Instantes de crispación para que al final no saliera a la luz el otro tema candente del Recreativo: el polémico contrato de gestión de la empresa Eurosamop. “Una privatización de un servicio público”, para Participa Huelva.
En definitiva, más de una hora de debate para salir con el compromiso de vender cuanto antes el Recreativo, de que el Ayuntamiento hará frente a un pago de 350.000 euros y que no se darán las fotocopias del contrato de gestión.
Y toda esta polémica para la modificación presupuestaria “de un 6%” de todas las que llevó el equipo de Gobierno al pleno, y que todas se aprobaron.
Un total de 2,3 millones de euros irán destinados a inversiones en la capital, para la puesta en marcha de las siete primeras actuaciones incluidas en los proyectos Edusi, la rehabilitación del Mercado de San Sebastián, el tercer plan de asfaltado y los dos proyectos de peatonalización en las barriadas de El Higueral y el Molino de la Vega.
Todo esto gracias al “saneamiento” de las arcas municipales al conseguir un superávit de quince millones, lo que permitió que el PSOE restregara ese dato a la anterior corporación “por recibir una ruinosa herencia”.
Unanimidad en que el Banco de España sea Museo Arqueológico
Por unanimidad se ha aprobado en el pleno celebrado este miércoles, a propuesta de Izquierda Unida, que el Ayuntamiento exija a la Consejería de Cultura que se adapte el antiguo edificio del Banco de España a un Museo Arqueológico. Y no es la primera vez que esto pasa por sesión plenaria. Se trata de la tercera vez después de una Declaración Institucional y de una iniciativa ciudadana impulsada por la asociación de Amigos del Museo (AMO).
El espíritu de la moción era que acordar que se haga “lo que todos los onubenses piden que se haga en ese lugar: un Museo Arqueológico. Ni más ni menos”, según Pedro Jiménez. Además de darle celeridad a las obras para evitar la devolución de los fondos Feder recibidos para la puesta en marcha del edificio del Banco de España.
Por otro lado, otro tema candente en la sociedad onubense es el derribo de la Casa Duclós. El pleno ha rechazado la moción presentada por el PP en la que se planteaba la constitución urgente de un órgano de participación y seguimiento del proyecto Edusi y el refuerzo de la protección del Parque Moret para evitar incidentes como el derribo de este patrimonio municipal.
En estas más de diez horas de pleno, el PP evidenció el distanciamiento entre sus ediles, dejando a Berta Centeno sin abrir la boca, y se notó el mal ambiente que se respira entre la edil de Ciudadanos, María Martín, y los dos concejales no adscritos, Ruperto Gallardo y Enrique Figueroa.
Por otro lado, se aprobó la moción de Mesa de la Ría para que el Ayuntamiento erija un monumento a la figura de Paco Isidro y de su hijo Pepe Isidro, en homenaje a lo que esta saga aportó al flamenco.
Por su parte, el grupo municipal de Ciudadanos vio aprobada su moción para instar al Consorcio de Transporte Metropolitano de la Costa de Huelva a que mejore “de forma inminente” los itinerarios y frecuencia de viajes en relación a las playas y a las cercanas Fiestas Colombinas, con el objetivo de evitar masificaciones.
También salió adelante que el Consistorio destine una parcela municipal a habilitar un área de estacionamiento y pernocta de autocaravanas y que se mejore el entorno del Muelle del Tinto.
Por último, en la sesión plenaria se ha actualizado la representatividad de la estructura política de la corporación en las distintas comisiones informativas y consejos de administración de las empresas municipales tras las salidas de Ruperto Gallardo y Enrique Figueroa de Ciudadanos.
