El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha denegado la petición de libertad provisional de F.J.M., acusado del doble crimen de Almonte (Huelva), en el que fallecieron en abril de 2013 una menor de ocho años y su padre y que lleva en prisión preventiva desde junio de 2014, al considerar que existen "suficientes indicios" de su intervención en los hechos.
Se trata de un juicio que se lleva celebrando en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Huelva desde el pasado 6 de septiembre y en el que el acusado se enfrenta a 50 años de prisión.
El TSJA ha dado respuesta ahora a un recurso de apelación presentado por la defensa a finales del pasado mes de julio ante el alto tribunal andaluz contra el auto dictado por la Sección Primera, que desestimaba la petición de su libertad provisional por riesgo de fuga y manipulación de pruebas.
En declaraciones a los periodistas en la puerta de los juzgados, Gustavo Arduán, abogado de la acusación particular ejercida por la familia paterna de los fallecidos, ha subrayado que esta decisión del TSJA es "importante porque el fundamento es que existen bastantes y suficientes indicios para poder hablar de la participación de este hombre en los hechos".
De igual manera, ha asegurado que si el TSJA "hubiera encontrado alguna irregularidad o inconveniencia en las decisiones tomadas por los jueces anteriores --todos lo han mantenido en prisión--, hubiese acordado la libertad provisional".
En cuando a la marcha del juicio, se ha mostrado "satisfecho" porque considera que "se están constatando los datos que hemos venido manteniendo y que acusaban e indicaban la participación del acusado en los hechos", punto en el que ha aclarado que no se sienten satisfechos por la condena sino porque "se va arrojando luz sobre lo que finalmente ocurrió".
NULIDAD DE LA PRUEBA DE ADN
Por otro lado, cabe recordar que la defensa ha anunciado la petición de la nulidad de la prueba de ADN hallado en tres toallas de la vivienda, donde aparecieron los cadáveres, y que contenía restos de los residentes en la casa y del único acusado por los hechos, al considerar que ha podido romperse la cadena de custodia, cuestionando, a su vez, la acreditación de la toma de muestras de su cliente.
Al respecto, Arduán ha precisado que es "una buena noticia", ya que pone de manifiesto que esa parte "quiere agotar todos los mecanismos de defensa y conseguir una solución contra la contundencia de pruebas que tiene en contra". A su juicio, "han cambiado la estrategia porque están oyendo lo mismo que nosotros".
Además, según ha añadido Aníbal Domínguez, hermano y tío de los fallecidos, "sus propios peritos hablan de la perfección e impecabilidad de las pruebas realizadas por la Guardia Civil y Toxicología". Sobre el juicio, se ha mostrado "satisfecho porque va por el buen camino y nos mantenemos en el optimismo".
