El hallazgo se produjo este martes por la tarde y se trata del segundo pez más grande del mundo, solo por debajo del tiburón ballena
Un tiburón peregrino (Cetorhinus maximus) de unos nueve metros de longitud ha aparecido muerto en la playa de Doñana, a la altura de Torre Carbonero.
El hallazgo se produjo este martes por la tarde y se trata del segundo pez más grande del mundo, solo por debajo del tiburón ballena, llegando a medir hasta diez metros de longitud, ha informado el espacio natural a través de su Facebook, consultado por Europa Press.
Se trata de una especie de tiburón absolutamente inofensivo ya que carece de dientes y se alimenta fundamentalmente de plancton. En Doñana han aparecido anteriormente otros ejemplares de esta misma especie aunque de menor tamaño.