El vicepresidente de Asociación de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) de Isla Cristina (Huelva), José Luis Rubio, ha señalado este jueves que la suspensión del carnaval isleño debido a la pandemia es una decisión que esperaban debido a la actual situación pero supone para el sector "un palo más" ya que ni ha habido Semana Santa, ni celebraciones, ni romerías, ni ningún evento que propicie el consumo.
En declaraciones a Europa Press, Rubio, el cual además es propietario del emblemático almacén El Barato, que tiene 91 años de historia, y que está unido a la historia del carnaval, ya que se pueden adquirir multitud de artículos relacionados con la fiesta, ha remarcado que dentro de la provincia el carnaval isleño fue "pionero".
Asimismo, Rubio ha apuntado que para su establecimiento el carnaval supone un 40 por ciento de sus ventas dado el arraigo del negocio tanto para el carnaval local como para otros de la provincia. No obstante, ha asegurado que hay que intentar ser positivos y poner las miras en que "seguro que poco a poco salimos de esta situación", ha dicho.
Tras recordar la intensa vivencia del carnaval en Isla Cristina, donde "más del 80 por ciento de las familias viven el carnaval de manera muy especial", ha indicado que desde septiembre a febrero se desarrollan todos los trabajos para la puesta a punto de los disfraces, de todo el atrezzo para las agrupaciones, etc, por lo que espera que el próximo septiembre pueda desarrollarse la actividad con normalidad. "Lo mismo se puede hacer algo, la cabalgata, por ejemplo, en agosto", ha dicho Rubio, que ha reiterado que "hay que seguir trabajando y ser positivos", dentro de la actual y complicada coyuntura.
El carnaval supone una verdadera fiesta en Isla Cristina, como ha enfatizado este empresario, que ha señalado que, además de todos los días de concurso, también está el carnaval en la calle que fomenta el consumo y la economía local y por tanto la suspensión tendrá su impacto en el pueblo.
Por ello, ha recordado que el sector ya se enfrentó a las cancelaciones de otros eventos y celebraciones por lo que asume con resignación la suspensión del carnaval, confiando en que todo mejore.