No está siendo un camino recto el que están siguiendo
el Real Jaén y Emilio Fajardo en las negociaciones para que este último acabe siendo el entrenador del equipo capitalino. Las pretensiones económicas del todavía entrenador del Marbella siguen siendo muy elevadas pues, además de un importante salario, pide la incorporación de un amplio cuerpo técnico, así como refuerzos de su confianza.
Unas peticiones que llevaron a que
el club rompiese toda negociación con él este pasado martes por la noche, aunque esa situación cambió poco después. El propio Ramón García, vicepresidente del club y uno de los máximos accionistas de Fomento y Promoción del Real Jaén (empresa propietaria del club), reconoce para VIVA Jaén que al poco de que se interrumpieran estas conversaciones sin vistas a retomarlas, fuera el propio entrenador el que lo llamó por teléfono para tratar de solventar la situación y que ambas partes sigan buscando la forma de llegar a un acuerdo con el que él recale en el banquillo de La Victoria. “La negociación con Fajardo no está rota”, puntualiza García para este medio.
Lo que es seguro es que Fajardo no quiere seguir en Marbella, y tiene ofertas para marcharse, y que el club de la Costa del Sol tampoco quiere tenerlo como técnico ni está dispuesto a pagarle lo que pide para abandonar la entidad, pues por el ascenso conseguido a la Segunda RFEF tiene un año más de contrato automáticamente. Sea cual sea el final, llegará casi seguro antes del fin de semana.