La Academia contesta al CES provincial y a la UJA, que habían pedido revisar la actual definición de los aceites por la confusión que suscita
La Real Academia Española (RAE) ha contestado al Consejo Económico y Social (CES) de la provincia de Jaén y a la Universidad de Jaén (UJA) que no va a modificar, “por el momento”, las definiciones actuales de los aceites de oliva.
El presidente del CES de Jaén y catedrático de Comercialización e Investigación de Mercados de la Universidad de Jaén, Manuel Parras Rosa, revela en una tribuna de opinión en la revista ‘Oleum Xauen’ que la RAE ha contestado al escrito remitido por el CES y por la Universidad al director de esa institución en el que proponía “unas definiciones correctas sobre los distintos aceites de oliva”.
Manuel Parras señala que una de las razones que ha dado la RAE es que “lo que proponemos son definiciones demasiado técnicas”, respuesta con la que no está de acuerdo, “puesto que las que ofrecemos son las que recogen las normas comerciales”, por lo que anuncia que seguirán insistiendo en esta petición.
El CES y la Universidad de Jaén remitieron al director de la RAE un escrito con el que solicitaban la modificación de las definiciones de los aceites de oliva por entender que no estaban recogidas todas las categorías que se pueden encontrar en el mercado y porque las que incluye “no las define correctamente, todo lo contrario, induce a la confusión”.
En el escrito se subrayaba que uno de los retos que el sector oleícola tiene por delante es que los consumidores distingan entre los distintos aceites de oliva y conozcan sus elementos distintivos.
Junto al CES provincial y la UJA, también la Fundación Savia por el Compromiso y los Valores, que preside el veterano activista del mundo agrario Francisco Casero, se sumó a esa petición por entender que la definición que hace el Diccionario de la RAE “ha quedado obsoleta en si misma e igualmente no ayuda a usuarios, fabricantes, consumidores e hispanohablantes en general a conocer de manera adecuada y precisa qué debe entenderse por ‘aceites de oliva’, ‘aceite de oliva virgen extra’, ‘aceite de oliva’ y ‘aceite lampante”.
La Fundación considera “importantísimo que en el diccionario de la lengua, aparezcan definiciones que respalden la importancia de este producto”. En concreto, para el Aceite de oliva virgen extra, la Fundación Savia propone la siguiente definición: “aceite de oliva de categoría superior obtenido directamente de aceitunas y solo mediante procedimientos mecánicos. Sus características organolépticas no muestran ningún defecto. Es el aceite de oliva de más calidad”.