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Sábado 16/11/2024
 

Jerez

Diez errores que debes evitar si te vistes de gitana en la Feria

Si quieres deslumbrar en el Real, toma nota del decálogo que hemos preparado en Viva Jerez

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Una bella mujer vestida de gitana con mangas abullonadas, la tendencia de este año.

Me dispongo un día más, y es el tercero que el lunes me tocó descansar (de la Feria), a entrar con paso firme por la portada principal, siempre con el pie derecho. Son las siete de la tarde, hace un sol de justicia, lo normal, pero nada que un buena copa de fino no pueda remediar. La gente está eufórica, también han vuelto las comidas de empresas de los martes. Todo va bien hasta que de repente me encuentro a una chica preciosa vestida de gitana con un bolso y unas gafas de sol. ¡Error!¡Y por partida doble!.Eso me recuerda que nunca viene mal repasar un decálogo para reforzar el look de flamenca. Siempre será más sencillo si no cometes ninguno de estos diez errores, de los que ya he adelantado dos. Toma nota:

1. Deja las gafas de sol en casa. No falla, la Feria del Caballo siempre regresa con todo su esplendor con el sol pegando fuerte con temperaturas que superan los treinta grados. Estoy con vosotras, soy la primera a la que le molesta de lleno en la cara, pero Martirio solo hay una. Solo ella puede permitírselo.

2. Nada de bolsos y sus variantes: bandolera, riñonera, colgado en el brazo. ¿Para qué están los bolsillos del traje de gitana? Es raro ya el diseño que no lo lleve, por eso es una de las primeras cosas que hay que comprobar, además de que nos quede a las mil maravillas. Eso sí, no os vengáis arriba y meter lo imprescindible: llaves, barra de labios, monedero y móvil. No es cuestión de llevar una piedra  cargando, os lo digo por experiencia, y cuanto más arriba vaya, mejor, si no queréis terminar la feria con la espinilla llena de cardenales (ups esto también me ha pasado).

3. Olvídate de soltarse el pelo y ponerte la flor caída. Cierto es que hace una década íbamos así, pero no hay nada más elegante que una mujer vestida de flamenca con el pelo recogido y la flor arriba, como si de una antena se tratarse, sí. Se lleva la maxiflor, los claveles naturales siempre están ahí, los ramilletes con distintas flores y las coronas, aunque este año se están viendo menos. No todas podemos ir a la pelu o tenemos arte para ponernos moño, así que también se admiten coletas. Pero hazme el favor de esconder la gomilla liándote un mechón del pelo.

4.El mantoncillo nunca en la cintura. No estamos en clase de baile, estamos en la Feria de Jerez. ¿Os parece poco?

5. Nada de vestidos por la rodilla a lo Marisol. Otra moda desafortunada para adultas en la Feria, y recalco lo de adultas porque para las niñas es la opción más cómoda y les queda genial.

6. No te pintes el lunar ni te pongas el caracolillo de Estrellita Castro. Afortunadamente este estilismo está en proceso de extinción, pero también lo hemos visto y no hace tan poco tiempo.

7. Olvídate de las manoletinas, zapatillas deportivas y similares. Solo perdonamos este calzado a la mujeres que hagan uso de él por problemas de salud o movilidad. A las demás, no os digo que os pongáis stilettos y os dejéis el pie en el Real, que ya tenemos bastante con dejarnos la voz, pero no hay opción más cómoda y económica que unas zapatillas de esparto. Eso de tirar de zapatillas deportivas con los volantes como han hecho algunas influencers en la Feria de Abril porque ya no pueden más es un pecado capital.

8. El móvil en el bolsillo, no en el escote del vestido.  Es otra de las manías de muchas chicas vestidas de flamencas. Además de que queda fatal, corres el riesgo de quedarte sin smartphone y estamos en unos tiempos en los que no podemos estar sin móvil. ¡Conecta con la Feria mejor!

9.No tires de transparencias. ¿Qué es eso de ir con el traje de gitana cargado de transparencias?Otro estilismo horrendo del que no queremos ni hablar.

10. Busca el equilibrio: el traje ni muy pegado ni demasiado holgado. Si te queda demasiado estrecho corres el riesgo de reventarlo, de no poderte sentar o incluso no poder andar bien. Pero, ojo, tampoco es cuestión de llevarlo sin encajar para ir más cómoda. Un poquito tienes que sufrir, pero irás guapísima. 

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