La trágica noticia ha corrido como la pólvora por redes sociales. Pansequito, esa voz tan admirada por todos por su brillantez y suma personalidad se apagaba tras un mes y medio sufriendo una enfermedad cerebral. Es sin duda una pérdida irreparable para el flamenco, para la cultura y para la música nacional. Ha muerto en el hospital San Juan de Dios del Aljarafe, Bormujos, en la mañana de hoy viernes, a diez minutos de Gines, donde residía en los últimos años junto a su mujer, la también artista Aurora Vargas.
José Cortés Jiménez nació en 1945 en La Línea de la Concepción aunque siempre se ha considerado del Puerto de Santa María. Era uno de los más firmes exponentes del flamenco de la segunda mitad del siglo XX, hasta la actualidad. De la época de Camarón, “mi hermano”, Lebrijano, Rancapino, Turronero… Fue uno de los elegidos para inaugurar el Tablao Los Canasteros en el invierno de 1963, sesenta años hace.
Fue revolucionario por su personalidad, de ahí que en 1974 el Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba le otorgase el ‘Premio a la Creatividad’, que no vuelve a entregarse desde entonces. Y es que hablar de José era asomarse al discurso más ortodoxo de lo jondo acercándose con personalidad y distinción a la frescura constante de los tiempos. Su impresionante trayectoria lo convirtió en mito, pues consiguió atrapar a los aficionados más exigentes y a los nuevos públicos que lo buscaban como icono jondo. El Compás del Cante de la Fundación Cruzcampo en 2010, el Flamenco Calle Alcalá en 2011 del Festival Bankia, Premio Nacional de la Cátedra de Flamencología de Jerez, Giraldillo al Cante de la Bienal de Sevilla, Trofeo Peña El Taranto por dos ocasiones, entre otros innumerables reconocimientos rezan en su palmarés.
Este año celebraría su cumpleaños artístico en el Potaje Gitano de Utrera, a quien se le dedicará junto a Aurora, en Tío Pepe Festival, entre otros grandes festivales. Su última gran fiesta fue en Jerez, en la Peña Tío José de Paula, en la noche de su zambomba.
Sus restos descansarán en El Puerto de Santa María, después de pasar la jornada de hoy en el tanatorio de la SE-30 de Sevilla.
