Por su parte el embajador de Reino Unido en España, Giles Paxman, expresó su "preocupación" por la situación y defendió la necesidad de colaboración entre las partes.
En declaraciones Paxman, tras manifestar su "preocupación" por estos hechos, ha confirmado las disculpas del ministro principal gibraltareño, Peter Caruana, y de la Policía del Peñón ante el Gobierno español.
Para el embajador británico, "ha habido incidentes a ambos lados" de la verja, si bien, como él mismo ha destacado, el suceso de primeros de agosto en San Roque "da más relevancia aún si cabe a la colaboración" hispano-británica-gibraltareña en el marco del Foro Tripartito de diálogo.
Asimismo, Paxman ha manifestado su deseo de que incidentes como el conocido hoy "no vuelvan a ocurrir".