El director del Instituto Andaluz del Flamenco, Cristóbal Ortega, ha expresado hoy su confianza en que el Museo del Flamenco de Andalucía, que tendrá su sede en Jerez, esté ya en funcionamiento cuando el próximo año se celebre una nueva edición del Festival que a partir de mañana vuelve a convertir a la ciudad en capital mundial de esta expresión artística.
Ortega ha confirmado que la Administración autonómica está
trabajando ya en la dotación de contenidos de este nuevo equipamiento cultural, que como se sabe ocupará una serie de fincas todavía en obras en el entorno de la plaza Belén y la calle Barranco.
En concreto, el director del Instituto Andaluz del Flamenco ha recordado que la Junta ya sacó una licitación pública precisamente para
avanzar en la museografía y museología del complejo, cuyas obras deberían estar finalizadas a lo largo del primer semestre del presente ejercicio.
En teoría, las actuaciones tendrían que haber concluido a finales de este año pasado. De hecho, se planteó la posibilidad de que ya estuvieran ejecutadas en noviembre, coincidiendo con la celebración del Día Internacional del Flamenco.
Sin embargo, e
ste proyecto, al igual que otros, también ha sufrido problemas derivados de la falta de suministros que han retrasado la ejecución de los trabajos.
No en vano, fue el propio presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, quien en una visita institucional al Ayuntamiento admitió que el museo no estaría listo hasta “el primer semestre” de este año.
Las obras del Museo del Flamenco de Andalucía
se iniciaron en diciembre de 2021 y tenían un plazo de ejecución de 23 meses y un presupuesto inicial de 6,8 millones de euros, cofinanciado por la Junta de Andalucía y los fondos Feder de la Inversión Territorial Integrada (ITI) de Cádiz.
Según la Junta, cuando se inaugure estaremos ante una infraestructura museística que “responderá a la necesidad de
un espacio que muestre, explique e integre la pluralidad de expresiones del flamenco, reconocido como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco”.
Todo el complejo se desarrollará en un
espacio edificable de más de 3.000 metros cuadrados, en el que se integra además el antiguo Zoco de Artesanía, que servirá de sede al
Centro de Documentación del Flamenco (CADF), que será trasladado desde el palacio Pemartín de la plaza San Juan.
La entrada principal del museo será por la calle Barranco. El equipamiento dispondrá de varias salas expositivas dedicadas a la historia y personalidades del cante, del toque y del baile.
En otras salas se explicará su relación con otras culturas como el arte de la pintura o el vino de Jerez. Además, contará con un auditorio para albergar espectáculos, exhibiciones cinematográficas, conciertos, presentaciones y conferencias, así como una cafetería y una tienda.
También se contempla la creación de un edificio de servicios museísticos y de administración en el que tendrán cabida los almacenes de fondos expositivos, talleres de restauración y administrativos.
En este espacio se realizarán tareas de restauración y acopio de bienes muebles y material museístico, además de las funciones de gestión y dirección del museo, que estarán intercomunicados con el edificio central y con el auditorio, pero que no será de acceso para el público en general.