Tras el paréntesis de las fiestas navideñas, estiba y multinacional danesa se sentarán en la misma mesa con el presidente de la APBA, Manuel Morón, como mediador.
Fuentes de APM consultadas por este periódico señalaban su “optimismo” en cuanto a poder resolver las diferencias y llegar a un acuerdo necesario para el Puerto.
“Lo importante es que vamos a ponernos a trabajar” señalaban las fuentes de APM, quienes remarcaron que, a pesar de la necesidad de sellar un acuerdo cuanto antes, “no queremos ir contrarreloj”, por lo que no hay un fecha límite fijada para cerrar los contactos.
Por otro lado, el desencuentro que acabó paralizando la terminal por unas sanciones a dos capataces podría haber servido al menos para sentar unos cauces adecuados para la negociación.
Garantías
La clave de la negociación pasa por equilibrar las pretensiones de ambas partes sobre la relación directamente proporcional entre reducir costes operativos y mantener o recuperar tráficos.
Como se ha venido expresando, el sector de la estiba podría estar dispuesto a realizar un esfuerzo, uno más tras el convenio de 2008, para fijar tráficos en el Puerto.
El problema reside en la imposibilidad de APM de asegurar que la naviera Maersk, la otra cara de la moneda en AP Möller Maersk Group, garantice rutas y tráficos.
Una solicitud razonable sobre la que los estibadores pidieron el apoyo a la entonces consejera Transportes de la Junta Rosa Aguilar. Aguilar se desplazó, como adelantó este periódico, a Estocolmo sin poder obtener una respuesta afirmativa.
El secretario general del sindicato Coordinadora (estiba) estará presente en las reuniones entre ambas partes dando fe de la importancia del encuentro para los portuarios.