La Hermandad del Consuelo ha solicitado ya la preceptiva licencia municipal para poder iniciar las obras de construcción de su futura capilla, en el entorno de Chapín, confiándose en que los trabajos puedan ejecutarse y culminarse a lo largo del presente ejercicio.
Se trata de un proyecto “más ajustado a las necesidades y a la realidad de la cofradía” que el que se presentó en su momento, según explica el propio hermano mayor, Marco Antonio Gómez, y que si bien obligará a la hermandad a hipotecarse económicamente por “muchos años” sí parece al menos realizable.
El proyecto utilizará “técnicas constructivas más modernas” y empleará incluso “materiales poco vistos en España” precisamente con el objetivo de abaratar costes, a pesar de lo cual Gómez augura que “el resultado va a gustar”.
De momento, el Señor del Amparo y María Santísima del Consuelo siguen recibiendo culto en el convento de las Hermanas de la Cruz, un lugar desde el que no pueden procesionar dada la ausencia de una puerta de la envergadura necesaria para hacerlo.
De ahí que nuevamente vayan a ser trasladadas a la parroquia de las Viñas de cara a la estación de penitencia del Miércoles Santo.
La Hermandad del Consuelo tuvo capilla propia en la Ronda del Pelirón, si bien se trataba de un local alquilado con escasas posibilidades de ampliación.
De ahí que se optara por buscar otro emplazamiento en el que levantar templo propio.
Esta circunstancia llevó a la cofradía a trasladar su sede temporal al convento de las Hermanas de la Cruz a finales de agosto de 2019, con el objetivo de ahorrarse el pago del alquiler del local que estaba haciendo las veces de capilla. Ahora parece que se acerca el momento de iniciar las obras de esa esperada capilla.
