Los hechos se produjeron después de que un vecino de la urbanización Averroes, en la barriada de La Granja, alertase a la Jefatura de la existencia en su patio de un reptil de grandes dimensiones. Personados en el lugar de los hechos, los agentes actuantes comprobaron cómo en un piso superior se encontraba una ventana abierta, por lo que tras hacerse cargo del ofidio comenzaron las investigaciones pertinentes.
Tras las indagaciones de rigor, los policías comprobaron que la pitón se había escapado de un domicilio particular que en esos momentos se encontraba vacío, cayendo por el patio interior del mueble. Tras comprobar la identidad del titular de la casa, que fue identificado como O.R.B., de 36 años de edad, nacido en la localidad sevillana de Mairena del Aljarafe y vecino de Algeciras, se constató que éste carecía del permiso obligatorio para tener un ejemplar de estas características, por lo que fue denunciado en virtud de la Ley 42/2008 de Tenencia de
Animales Potencialmente Peligrosos al no disponer de la pertinente licencia, carecer la serpiente de identificación y no adoptar las medidas necesarias para garantizar la seguridad. Tras la intervención, la serpiente fue trasladada al zoológico de Castellar de la Frontera.
En otro intervención, una patrulla de la Policía Local que realizaba servicio en la zona del centro bajo de la ciudad comprobó cómo dos personas vendían lo que al parecer eran teléfonos móviles a una tercera, que reclamó la presencia de los agentes, quienes comprobaron que se trataba de maquetas de terminales, quince en total, y de cinco baterías para estos aparatos, habiendo vendido uno de ellos al comprador por cincuenta euros, quien al comprobar lo que en realidad había adquirido se personó en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía para presentar una denuncia por estafa.
En base a estos hechos se procedió a detener a L.M.D.P., de 23 años, y de J.O.B.G., de 20 años de edad, ambos nacidos en Ciudad Real, a los que se acusa de un presunto delito de estafa.