Los hechos tuvieron lugar en abril de este año como consecuencia de un control de la Guardia Civil a la altura del kilómetro 87 de la A-381, dentro del término municipal de Los Barrios.
Los agentes pararon un vehículo, y al dirigirse los efectivos hacia el coche para pedir su identificación a los ocupantes, observaron que uno de ellos lanzaba un teléfono móvil a la cuneta.
Los traficantes que cargaban la droga venían detrás y ya habían sido avisados de la presencia del control, por lo que los agentes tomaron las medidas oportunas para que no se escapasen.
Lanzadera
A los pocos minutos, un vehículo efectuó un extraño en su trayectoria que hizo sospechar a los agentes. Tras efectuarse el consiguiente registro, se encontraron en el vehículo los mil gramos de estupefaciente.
La Fiscalía pedía inicialmente cinco años para los acusados, que finalmente, y tras valorarse las pruebas recogidas y demostrarse su culpabilidad, quedaron reducidos en un año y medio.