El tiempo en: Aljarafe

Jerez

Cartero del barrio... por aclamación

Antonio García Ruiz es el repartidor de La Línea que más tiempo lleva en la calle (25 años)

Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
  • El cartero Antonio García. -
La figura del cartero de barrio trata de continuar siendo sinónimo de confianza, de cercanía y de servicio a los vecinos dentro de las barriadas.

El repartidor tiene que lidiar diariamente con variados desafíos que se le presentan a la hora de entregar la correspondencia, aspectos que en muchas ocasiones tienen que ver con las circunstancias personales de cada vecino (cambios de residencia sin resolver, problemas de movilidad del destinatario...).

Nadie mejor que el cartero de barrio conoce estas circunstancias, y cómo atender las necesidades concretas de sus vecinos. Hacen falta años para llegar a comprender adecuadamente la realidad de cada barrio, y esto lo saben los propios vecinos.

Cuando un cartero se va de vacaciones, o bien abandona de forma temporal o definitiva la barriada, los vecinos suelen responder con cierta desconfianza e incluso enfado. En el caso concreto de Antonio García Ruiz, su efímera marcha del distrito postal número 10 de La Línea causó una auténtica conmoción. Esta barriada comprende calles como Padre Pandero, Gibraltar, Mariano de Cavia, Donoso Cortés, Becquer, Berruguetes, Argensola, Santa Brígida, Santander o Gómez Ulla.

García Ruiz lleva 25 años repartiendo en Correos, 21 de ellos en este barrio. En el verano de 2008, decidió cambiar de aires en busca de una carga de trabajo más leve, pero no imaginaba la reacción que tendrían sus vecinos.

“Mucha gente me llamaba. Algunos no sé cómo consiguieron mi número”, explicaba este cartero de 49 años. “Me echaban de menos y me rogaron que volviera” reconoció. Él mismo comprendió que no iba a poder desvincularse tan fácilmente de su barrio. “El lapso de tiempo que estuve fuera fue de una semana, pero se me hizo eterno”.

No se trataba sólo de que las cartas no llegasen como siempre. La amabilidad, la disposición de Antonio a hacer un esfuerzo extra para facilitar la vida a los vecinos, fue una calidad tenida en cuenta por sus admiradores.

”El trato con las personas te enseña muchas cosas. Sabes todo de todo el mundo, pero hay que ser respetuoso. Escuchar siempre y nunca hablar de más”, manifestó.

Este cartero ha conocido las mochilas de cuero y las antiguas libretas de certificados, que ahora ha cambiado por el carrito de última generación y la PDA. “Ahora cargas más cosas, pero repartes mejor y con más comodidad. En cuanto a la informatización, los primeros días cuesta, pero es cuestión de voluntad”, aseveró.

Correos tiene dividido el municipio en 30 zonas, 21 de reparto a pie y las otras nueve, en moto.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN