Denuncian que los servicios mínimos están obviando a los centros médicos de las pedanías
Desde el pasado viernes a las 06.00 horas que comenzó la huelga indefinida, la plantilla de Urbaser, exceptuando a los que cada día les toca los servicios mínimos, permanecen reclutados las 24 horas del día en la sede de Urbaser, su centro de trabajo, donde agotan las horas muertas jugando al dominó y analizando la última hora del conflicto, aunque a partir de este lunes trasladarán sus protestas paralelas a la huelga a la calle.
Hasta el día de ayer el contacto tanto con el Ayuntamiento como con la concesionaria había sido “nulo”, tal como apunta el presidente del comité de empresa, Juan Manuel Cazalla, aunque mañana los representantes de la plantilla y la empresa volverán a mantener una reunión para que esta última les entregue la documentación relativa al ERE para 125 trabajadores que pretende aplicar amparada en los recortes presupuestarios de un Ayuntamiento al que Cazalla ha recriminado que sus gobernantes “en vez de arreglar las cosas” se hayan dedicado en los últimos días a “echar más mierda, sin hacer nada por descongestionar el conflicto”. En este sentido, insiste en que son tres las partes que deben sentarse y que “todos debemos dejarnos algo en el camino, no sólo nosotros”, señala. En lo que respecta a incidencias, la plantilla ha detectado que los servicios mínimos decretados por la Junta están obviado a los centros médicos y mercados de las zonas de las pedanías, dando prioridad al casco urbano de Jerez sobre el entorno rural.