El grupo municipal y provincial de Foro Ciudadano ha elevado a los próximos plenos ordinarios del Ayuntamiento de Jerez y la Diputación de Cádiz, respectivamente, una propuesta de acuerdo para el desarrollo del Plan de Actuación Estratégico 2013-2015 para el Complejo La Atalaya de Jerez, cuyo ente gestor es la Fundación Andrés de Ribera (FAR) y el cual está participado por ambas administraciones públicas desde la constitución del patronato hace ahora 26 años. En este sentido, desde esta organización política se ha elaborado una batería de medidas muy concretas para revitalizar y tender a la autofinanciación de unas instalaciones con un enorme valor potencial en materia turística, congresual y de ocio. “Tras la permanente situación de incertidumbre por la que ha pasado la institución en el anterior período corporativo, donde incluso se llegó a plantear su disolución, entendemos desde Foro Ciudadano que es el momento de impulsar acciones encaminadas a la revalorización de los importantes activos que constituyen el complejo Atalaya de Jerez”, recoge la propuesta que han registrado los miembros del Foro, José López, como diputado provincial; y José Ramón Alonso, como concejal de la Corporación local. La misma demanda de acuerdo expone que “transcurrido un año desde la reanudación de las sesiones del patronato, consideramos fundamental que este referente para la recuperación de la economía jerezana y de la provincia logre una verdadera puesta en valor de unas instalaciones que, a nadie se le escapa, siguen infrautilizadas”.
Concretamente, el Plan Estratégico 2013-2015 para La Atalaya se desglosa en las siguientes propuestas específicas:
• Reconversión de las instalaciones en un centro de congresos y negocios en la ciudad para reuniones y encuentros profesionales con cabida hasta para alrededor de 500 personas.
• Creación de un Consorcio Escuela, vinculado a acuerdos con la Universidad de Cádiz o la Junta para establecer prácticas de Turismo o Escuelas Taller específicas.
• Impulso al Museo del Tiempo, mediante la consecución de patrocinios y demás fórmulas
• Reapertura del Museo del Vino, y ligado a esto, integrar dichas instalaciones en la Ruta del Vino y el Brandy del Marco de Jerez.
• Descartada su posible enajenación para posterior venta, el chalé de la calle Cervantes (dentro del complejo) con 809 metros cuadrados de superficie y 603 metros de jardines debe dedicarse a usos que contribuyesen a generar recursos para la FAR. Puede transformarse en restaurante temático y espacio para la venta de merchandising y souvenir de La Atalaya y, en general, de Jerez y la provincia.
• Integración de la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía en el patronato de la FAR y vincular la oferta comercial de La Atalaya a otros atractivos como la Real Escuela Andaluza de Arte Ecuestre. Podrían crearse ‘packs’ de visitas y otras ofertas.
• Venta del inmueble que la FAR posee en calle Ancha al Consorcio de Aguas de la Zona Gaditana, que actualmente es inquilino del mismo y que ya ha mostrado interés en el mismo. Esto no resuelve los problemas de fondo pero aportaría liquidez suficiente para abordar las mejoras para el nuevo impulso del complejo La Atalaya.
• Utilización de la nave Don Jorge como espacio para celebraciones de todo tipo. Al hilo de esto, también pueden establecerse tasas específicas para la utilización del complejo para usos alternativos como filmación, reportajes publicitarios o de enlaces matrimoniales.
La Fundación Andrés de Ribera, participada por la Diputación de Cádiz y el Ayuntamiento de Jerez, es la encargada de la gestión del complejo de La Atalaya en Jerez, que durante este ejercicio cumplirá su vigésimo sexto aniversario desde su constitución el 10 de julio de 1987. Desde entonces, tal y como recoge la propuesta que ha presentado Foro Ciudadano a la Diputación y al Ayuntamiento, la entidad ha pasado por distintas vicisitudes que han tenido como consecuencias la existencia de enormes dificultades para garantizar su solvencia económica mediante la autogeneración de ingresos a partir de exprimir el enorme potencial de estas instalaciones públicas. Pese a que entre los años 2000 a 2005 se elabora un Plan de Viabilidad y se proyecta un ambicioso complejo museístico, el Museo del Tiempo y el Misterio de Jerez (con perspectivas de alcanzar los 170.000 visitantes anuales); a lo que se añade posteriormente la rehabilitación de la llamada Bodega del Sindicato (nave Don Jorge), financiada con fondos europeos, como espacio polivalente, lo cierto es que el hecho de que los patronos no cumplieran con sus aportaciones económicas y, especialmente, la falta de un claro liderazgo para poner en valor el enorme patrimonio de la FAR acaban por llevarla a una situación de especial gravedad.
Así lo pone de manifiesto un nuevo Plan de Viabilidad encargado a una empresa externa en mayo de 2008. En ese momento, y prácticamente hasta la actualidad, la situación es de quiebra técnica, la docena de trabajadores del complejo percibe sus nóminas con permanentes retrasos e incluso la Seguridad Social embarga un inmueble que la FAR tiene en la jerezana calle Ancha para saldar la abultada deuda. Todo esto deriva, a su vez, en el desaprovechamiento total y paulatino de las instalaciones, hasta el punto de que el Museo del Vino (el Misterio de Jerez) cierra sus puertas en 2011 y el de los Relojes (Museo del Tiempo) se queda penosamente hasta sin el relojero que da cuerda a las piezas, una de las colecciones más importantes de Europa.
