El propio defensor barreño dijo ayer a EL FARO INFORMACIÓN que “yo hice una entrada al jugador, que es falta, sí, pero ya está, pero él se vino hacia mí y me dio un cabezazo. Caí al suelo y fue cuando vinieron todos ellos para pegarme patadas y pisotones. Tengo el tobillo hinchado. Mis compañeros trataron de defenderme y entró hasta el público”.
“El árbitro era un niño (Bancalero Ruiz) y al principio paró el partido de manera definitiva. Expulsó al de casa y mi sorpresa es que me enseñó la segunda amarilla, por la cara. Luego vino la Policía Local y la Guardia Civil y el colegiado dijo que no se jugaba más pero tras 55 minutos de parón dijo que se volvía a jugar tras comerle el coco al árbitro, que encima luego dice que quedaban 22 minutos cuando se paró en el 80’. Le dijimos que había suspendido el partido y que no se iba a jugar más, pero nada”, relató, añadiendo que “al final no he denunciado a mi agresor porque no quiero entrar en más problemas y tampoco tenía sus datos. Lo que queríamos era volver pronto a casa pues de salir a las dos lo hicimos más tarde de las cinco”.
Tarek, que también hace las labores de segundo entrenador, comentó que “esta ha sido la primera vez que me ha pasado algo así. Yo he jugado en Primera en Marruecos, en Francia, en Bélgica, en Segunda de Italia y nunca me pasó esto. Es lamentable. Luego me insultaron, me dijeron moro y demás, pero que voy a hacer”.