La Hermandad de la Expiración ha organizado cuatro veladas flamencas que tienen como principal objetivo recaudar fondos para sufragar las obras que actualmente se están ejecutando en la ermita de San Telmo.
Los espectáculos tendrán lugar los viernes 11, 18 y 25 de septiembre, y 2 de octubre, comenzarán a las 22.00 horas y tendrán como marco el patio del colegio Al Andalus (antiguo Grupo Franco). Las entradas tienen un precio único de 5 euros.
La primera velada, el viernes 11 de septiembre, contará con el cante de Juan Lara y Juanillorro, acompañados por la guitarra de Jesús de Rebeco. El viernes 18 de septiembre intervendrán los cantaores José Moneo y Paco El Gasolina, con la guitarra de Jesús Agarrado.
Eva Rubichi será la encargada de abrir la tercera de las veladas, el viernes 25 de septiembre. Ese día también actuará el cantaor Antonio Agujetas, todos ellos acompañados por la guitarra de Domingo Rubichi.
El último de los espectáculos, programado para el viernes 2 de octubre, tendrá como protagonistas a Manuel Garrido Fernández y Pedro Garrido Fernández, los niños de la Fragua, que contarán también con el acompañamiento a la guitarra de Domingo Rubichi. En las veladas participarán como palmeros José Rubichi y José Peña, cerrándose todos los espectáculos con el correspondiente fin de fiesta.
Las obras, a buen ritmo
Las obras de rehabilitación de la ermita de San Telmo, que afectan fundamentalmente a las cubiertas del templo, avanzan a buen ritmo, si bien el desarrollo de las mismas ha puesto de manifiesto la necesidad de intervenir también en la techumbre de la sala de vitrinas, que es de madera y se encuentra afectada por las termitas.
Los trabajos han permitido apreciar una imagen insólita de la ermita, desprovista de su característica cubierta de tejas. En estos días está concluyendo la colocación de la nueva estructura, integrada por vigas de acero, estando previsto que a lo largo de la próxima semana puedan volverse a colocar las tejas.
De este modo se culmina la fase más delicada de los trabajos, que era necesario que finalizase antes de la llegada de las lluvias otoñales. La previsión es que la ermita de San Telmo pueda ser reabierta al culto a principios del próximo mes de febrero, al inicio de la Cuaresma.
