Genial. Serio en el trabajo. Guitarrista y compositor y productor. Salió de Jerez hacia Madrid y de Madrid retornó a su Jerez, a su barrio, a su calle Encaramada donde días pasados recibió la llamada de Susana Díaz anunciándole que le habían concedido la Medalla de Andalucía. En vida, como él soñaba.
La historia de los artistas las juzga el tiempo. Llevo muchísimos años de profesión y desgraciadamente cuando te empiezan a reconocer los que has hecho es cuando ya no estás. Afortunadamente he tenido muchos reconocimientos y en vida he tenido casi todos los que podría apetecer un artista”, reflexionaba hace un par de años el universal Paco Cepero que este próximo martes recibirá la Medalla de Andalucía, una distinción que, esta vez sí, “ha llegado, gracias a Dios, en vida”, como entiende que deben ser los reconocimientos para “disfrutarlos con la familia, con los amigos y también uno mismo”.
Un reconocimiento que le ha dejado “satisfecho” porque ha recibido muchísimos en su dilatada vida como guitarrista y compositor pero “me faltaba el de mi tierra” y esta Medalla de Andalucía es un “sueño cumplido”, por lo que “ya puedo dormir tranquilito”.
La noticia se la dio la propia Presidenta andaluza, Susana Díaz, que hizo que “se me saltasen las lágrimas” ya que se emocionó y apunta que será, la del martes, “una jornada inolvidable”.
Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes. Artista con letras mayúsculas. Personal e intransferible, Paco Cepero nació en 1942 en Jerez, en la calle Encaramada, donde ahora mismo vive porque “cuando me hicieron académico de la de San Dionisio, hice una alegoría de mi vida y dije “hoy cumplí 70 años y me parece que fue ayer cuando salí hacia Madrid con el ansia de volver”. Yo siempre tenía el ansia de volver. Primero me fui a El Puerto hasta que tuve la suerte de encontrar este rinconcito en la misma calle en la que nací. La calle está ahora muy bonita, pero cuando me vine a vivir no pasaban por aquí ni los gatos. Después de meterme en esta casa comenzaron a edificar y lo edificado llega ya hasta Oropesa”, recordaba en una pasada entrevista a este mismo medio. San Miguel es su barrio “tan bonito”, que le hizo un día escribir “dejadme andar por Jerez que cada vuelta que doy siempre la vuelvo a encontrar, su mirada fija en mí al de la Puerta Real/dejadme andar por Jerez que me embobo cuando miro la torre de San Miguel/ dejadme andar por Jerez que a borbotones me salen recuerdos de mi niñez”.
Su historia personal y profesional que comenzó a labrarse, curiosamente, en el Teatro Falla de Cádiz con 16 años. En 1963, Manolo Caracol lo contrató en Madrid para trabajar en el mítico tablao Los Canasteros. Allí acompañó con su toque el cante de figuras como La Paquera, El Lebrijano, Camarón, El Terremoto, La Perla de Cádiz o Tío Borrico. La amplia discografía de Paco Cepero atestigua la evolución de su trayectoria artística y su consolidación como solista y compositor, con trabajos como 'Amuleto' (1977); 'De pura cepa' (2000); 'Corazón y bordón' (2004); 'Abolengo' (2007), o 'Suites Gades' (2012), en conmemoración del Bicentenario de la Constitución de 1812 y que, para él, ha sido su obra “ más importante. Son palabras mayores. Una obra sinfónica no es un disco, ni unos tanguitos. Es otro mundo. Me metí ahí con todo mi respeto y sufriendo mucho hasta que la vi en el Falla, con los músicos, en el estreno. Era la guindita que le faltaba al pastel de mi vida musical. Después de haber hecho todas las canciones, cinco marchas procesionales, el himno musical de la coronación de la Virgen del Valle o de la Esperanza de La Yedra”.
Un Paco Cepero que no fue el descubridor de Camarón pero que “la etapa más bonita de Camarón la viví yo con él, porque era cuando estaba en su plenitud. Ahí está la que ha formado, pero su mejor época se la cogí yo”,
De aquel Amor, Amor de Lolita
Guitarrista y compositor, recuerda que “ componía desde pequeño pero ni siquiera me había dado de alta en la Sociedad de Autores. Le daba las canciones a alguien y cuando las escuchaba me volvía loco de contento, pero no me imaginaba nunca..., hasta que llegaron los éxitos. Aquello fue un boom. La primera canción que pegó fue ‘Me tocó el perder’ de Turronero y ya entró en mi vida Chiquetete y aparece ‘Te quiero niña’, ‘Dame tu querer’, ‘Tú y yo’ y la que me descubre como compositor y ya me llaman todas las compañías discográficas fue ‘Amor, amor’ de Lolita. Luego le hago el disco ‘Aprende a soñar’ a Chiquetete y vendimos un millón y pico que en aquella época era increíble. Fue un éxito internacional. Fuimos número 1 en Los Angeles, Méjico..., fue una canción que terminaron grabando Julio Iglesias, El Puma, Los Panchos, Franky Martínez..., se hicieron muchísimas versiones. A partir del ‘Amor, amor’ de Lolita comencé a hacer producciones y le hago canciones a Manolo Escobar, Rocío Jurado, Isabel Pantoja, todavía se siguen cantando, a El Fary le hice número 1 en Los 40 Principales...Y María Vidal, María del Monte, Los Marismeños, Bordón 4...”
