El Conjunto Monumental del Alcázar acoge desde este domingo la décima edición de Vinoble, el Salón Internacional de los Vinos Nobles, Generosos, Licorosos y Dulces Especiales, que reúne a 25 regiones vitivinícolas y más de sesenta expositores.
La alcaldesa, Mamen Sánchez, subrayó en el acto de inauguración la singularidad de un certamen que va más allá del encuentro profesional que persigue el cierre de transacciones comerciales para convertirse en un lugar en el que “vivir experiencias”. Vinoble es por tanto un lugar que permite que los profesionales de los cinco continentes que se han inscrito en la presente edición puedan “disfrutar” de su pasión por la enología y la viticultura, de ahí que no estemos ante “una feria normal”.
Más allá de la particular ubicación del certamen, la regidora incidió en la decisión de cerrar el salón entre las 14.00 y las 17.00 horas para que los profesionales tengan la oportunidad de disfrutar de los maridajes gastronómicos que se preparan en los restaurantes del centro de la ciudad.
El certamen cuenta en esta ocasión con más de sesenta expositores de países como España, Estados Unidos, Hungría, Francia, Italia y Portugal, además de mostrar vinos procedentes de Canadá, Alemania o Austria. En total son más de ochocientas las referencias que pueden disfrutarse y en los diferentes stands que se distribuyen entre el patio de San Fernando y el palacio de Villavicencio.
En esta décima edición, Vinoble se hace más presente en la calle de lo habitual, ya que al programa de catas que se desarrolla en el Conjunto Monumental del Alcázar se suman otras tres catas en la plaza del Arenal, con carácter gratuito y en las que puede participar el público en general. Esas catas dan comienzo diariamente a las 20.30 horas. La de este lunes tiene como protagonistas a los vinos andaluces mientras que la del martes se centrará en los caldos jerezanos. El acceso es libre hasta completarse el aforo, de un centenar de personas. El objetivo de esta iniciativa es favorecer la oportunidad que supone participar en este tipo de experiencias. Estas catas corren a cargo de la asociación vinícola Sherry Women y los consejos reguladores de las denominaciones Montilla-Moriles, Málaga, Jerez y Huelva.
Tras el acto inaugural tuvo lugar la primera de las catas, en la Mezquita del Alcázar, en la que pudo degustarse una selección de Grand Cru Classés de Sauternes. Como novedad de la presente edición sobresale una cata vertical de Osborne, bajo el lema Sherry and Rock and Roll, en la primera experiencia de maridaje con este género musical. Esa cata será dirigida por Iván Llanza, a mediodía de este lunes en la Mezquita. Destacan también la cata de vinos portugueses, oportos y madeiras; así como la cata comparativa sobre las diferencias en la elaboración entre los cavas oxidativos y el Champagne. La programación también incluye un show cooking diario en uno de los patios del Conjunto Monumental del Alcázar, como actividad complementaria organizada por la Diputación Provincial de Cádiz.
El delegado territorial de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural en Cádiz, José Manuel Miranda, subrayó en el acto de apertura la “apuesta decidida” de la Junta de Andalucía por este salón, que a su juicio es “el mejor de los eventos de los vinos generosos, generosos de licor y dulces”. Según Miranda, Vinoble permite que los profesionales que acuden a él “aprendan conocimientos” de otros territorios y regiones vitivinícolas, abogando en este sentido por la necesidad de potenciar el enoturismo y, sobre todo, de descubrir “la tierra” y el “origen” de los caldos. Por último, el vicepresidente de la Diputación Provincial, Jaime Armario, destacó el trabajo que viene haciendo esta administración para fortalecer al sector vitivinícola en el exterior, vinculándole al turismo y la gastronomía.