Profesionales de la
Unidad de Tumores Musculoesqueléticos del Hospital Regional Universitario de Málaga han empleado la
impresión 3D para intervenir en quirófano a un
paciente con una fractura de clavícula ocasionada por un tumor. Esta técnica se empleó para extirpar el tumor con los márgenes de seguridad planificados previamente para
aumentar la seguridad del procedimiento y obtener una
mayor calidad en la posición del implante.
En la intervención participaron
ocho profesionales, tanto de Traumatología, como de Anestesia y Enfermería. El paciente intervenido había sufrido una
fractura de clavícula a consecuencia de un traumatismo leve y, tras estudio de anatomía patológica, fue
diagnosticado de un tumor llamado granuloma eosinófilo que había debilitado el área y favorecido la aparición de la fractura.
Dada la complejidad del caso, el equipo de la Unidad de Tumores Musculoesqueléticos diseñó una
prótesis en 3D personalizada para que esta coincidiese con la anatomía del paciente, mejorando así la precisión y aumentando la seguridad del procedimiento, han precisado desde la Junta de Andalucía en un comunicado.
En este sentido, el responsable de la mencionada unidad, el traumatólogo Diego J. Moriel-Garceso, explica que la cirugía con una resección --operación quirúrgica que consiste en separar total o parcialmente uno o varios órganos o tejidos del cuerpo-- de márgenes amplios que permite esta planificación guiada
consigue evitar la posibilidad de que la patología oncológica recidive.
"La clavícula es uno de los llamados huesos prescindibles.
De no haber contado con la posibilidad de esta prótesis 3D, la cirugía habría consistido en una resección completa de la clavícula, es decir, quitarle al paciente la clavícula sin reconstruirla y aceptar las posibles secuelas del procedimiento. Gracias a esta prótesis, el paciente realiza su vida sin ningún tipo de limitación funcional", señala.
Moriel-Garceso sostiene que el uso de este tipo de prótesis "
abre una ventana de posibilidades en la reconstrucción de los defectos óseos derivados de la resección. De hecho, también prevemos su utilización en la
reconstrucción de tumores de pelvis y huesos largos como fémur, tibia o húmero".
Por su parte, el también traumatólogo David González Quevedo indica que la tecnología de impresión 3D permite la planificación quirúrgica en áreas anatómicas especialmente complejas. "Esto facilita determinar de forma exacta la resección del tumor y la forma exacta de los implantes que sustituirán el hueso retirado en el acto quirúrgico", añade.
"La aplicación de esta tecnología tiene la ventaja de que reduce el tiempo de intervención, el uso de radiación ionizante, el sangrado intraoperatorio, el riesgo de infección y otras posibles complicaciones quirúrgicas, acelerando la recuperación clínica del paciente", apunta, al tiempo que agrega que la planificación 3D forma parte de la estrategia de la Unidad de Traumatología para potenciar la dedicación y la calidad en la atención a los pacientes que padecen procesos oncológicos que afectan al aparto locomotor.