La Diputación de Málaga ha vuelto a reanudar la actividad de la
residencia San Carlos, en Archidona (Málaga), que en principio contará con
20 plazas concertadas con la Junta de Andalucía para mayores dependientes. La institución provincial ha invertido en los últimos meses
más de medio millón de euros en diversas obras para adecuar las instalaciones y en el equipamiento del centro.
El presidente de la Diputación, Francisco Salado, ha visitado este miércoles la residencia y ha resaltado que la reapertura del centro se ha llevado a cabo una vez que han
concluido todas las actuaciones necesarias para recibir la autorización de funcionamiento como centro sanitario por parte de la Junta.
Para proceder de nuevo a la reapertura del centro, la Diputación ha desarrollado diversas obras de
adecuación del inmueble, así como el suministro para el adecuado
equipamiento del centro. Por ejemplo, se ha llevado a cabo la modificación de la segunda planta del centro residencial y la mejora del tejado, lo que ha permitido la obtención de la acreditación para el concierto de plazas.
También se han
adecuado otros espacios interiores, como las salas de fisioterapia, terapia ocupacional y psicología. Y se han
reformado diversas dependencias, entre ellas la sala de enfermería, la consulta médica y la de depósito de medicamentos. Igualmente, se ha procedido a la puesta en marcha de la maquinaria de cocina, la comprobación del estado de la caldera y del sistema de calefacción.
En cuanto al equipamiento de la residencia, se ha procedido a la adquisición de
camas geriátricas para grandes dependientes, sillones para salas de estar y habitaciones, colchones, almohadas y material de fisioterapia. Además, se han comprado una lavadora-secadora, acumuladores de agua caliente sanitaria y los uniformes del personal. Paralelamente,
se sustituirá la caldera de gasoil por un sistema de aerotermia para mejorar la eficiencia energética del centro residencial.
A todo ello hay que añadir que se dedicarán unos
367.000 euros a la contratación de la limpieza del centro, y paralelamente, se ha realizado la
adecuación de la plantilla necesaria a las exigencias de la Junta para los centros residenciales de atención a las personas mayores en situación de dependencia.
Para ello, se ha procedido a
dotar al centro del personal especializado necesario, por lo que cuenta con médicos, enfermeras, auxiliares de clínica, trabajadora social, terapeuta ocupacional, fisioterapeuta, además de cocineras, limpiadoras y personal de mantenimiento.
Salado ha asegurado que la institución provincial "destinará
12,2 millones de euros a sus centros asistenciales durante 2023, lo que supone
un 6,24% más que lo dedicado este año". Y ha concretado que, "de momento, la residencia San Carlos comenzará a funcionar con 20 plazas concertadas tal como ya se rubricó con el Gobierno andaluz, con una vigencia hasta septiembre de 2023".
Además, ha añadido que en abril se solicitó la ampliación del concierto en otras diez plazas adicionales, lo que está pendiente de resolución por parte de la Junta. El objetivo final es que el centro pueda llegar a albergar a 49 personas.