El Unicaja recibió este sábado un gran homenaje en la vuelta a competición. A la altura de las ocasiones especiales, pero sin la necesidad de ir de etiqueta. Camisetas verdes y moradas y ganas de baloncesto eran los únicos requisitos. Antes de enfrentarse y ganar al Girona en el Carpena, lleno con 10.602 espectadores, los aficionados se pudieron fotografiar con la Copa del Rey ganada en Badalona y vibraron con el estreno del documental de la ACB y, sobre todo, con el despliegue de la lona conmemorativa de campeones en lo más alto del pabellón.
Los aledaños del Martín Carpena presentaban un ambiente de día grande, pues no todas las jornadas hay una Copa del Rey con la que fotografiarse, y menos aún si se ha conquistado de una forma tan épica como en Badalona, con victorias sobre Barça, Real Madrid y Lenovo Tenerife.
Los aficionados malagueño no quisieron dejar pasar esa instantánea, por lo que desde las 16.30 horas había gente haciendo cola para posar junto al trofeo. Además, más carpas con juegos y concursos con premios animaron a varios miles de aficionados de todas las edades.
Se habían vendido todas las entradas desde hace días y los actos de celebración del título instaron al club cajista a citar a la gente con tiempo para evitar unas aglomeraciones que no se produjeron, aunque las largas colas para acercarse al trofeo fueran inevitables.
Una vez dentro, el Palacio de los Deportes malagueño se convirtió en una sala de fiestas a lo grande. El rugido de su gente se empezó a notar al llenar los asientos a falta de media hora del inicio del partido.
Cuando salieron los jugadores y el cuerpo técnico al parqué fue cuando estalló la afición. El pasillo del Básquet Girona fue un gesto de cortesía con un gran simbolismo: se vio a un campeón de todo como Marc Gasol aplaudir con admiración y respeto al Unicaja.
Momento para la historia en el Carpena. ?? pic.twitter.com/e9ge4g01kE
— Alberto Fuentes (@albfuenteslopez) March 4, 2023
El menor de los Gasol se llevó la otra gran ovación de la hinchada malagueña, que él agradeció con un aplauso. Se creó, por tanto, una atmósfera festiva que se convirtió en emoción con la reproducción del documental de 15 minutos producido por la ACB, titulado "El sueño del Unicaja: ¿por qué no?".
Ésa fue la pregunta clave, el mantra del equipo de Ibon Navarro en Badalona que lo llevó a conquistar el título copero, una arenga sobre la que gira el cortometraje y que arrancó gritos de alegría y aplausos del público.
“Todo nace en establecer qué queremos ser”, decía Ibon Navarro en una de sus intervenciones en el documental, y es que el Unicaja ha logrado ser lo más parecido a una familia a la que, ya en el calentamiento, se le veía aún en estado de euforia, con un extra de motivación.
Se oyó a todo el pabellón de pie gritando “¡Campeones, campeones!" y el ya clásico “¡Ibon tiene un plan, Ibon tiene un plan!”, para dar paso al momento más icónico, el himno del club a capela con todo el público al unísono, alzando banderas y bufandas.
Con la Copa del Rey presidiendo el centro de la pista, previo vídeo recordatorio de la hazaña, se desplegó la lona conmemorativa del título copero, junto a los cuatro restantes: Copa Korac 2001, Copa del Rey 2005, Liga ACB 2005/06 y Eurocup 2016/17.
Un momento histórico al que se sumaron Alberto Díaz y Gonzalo Nuño, capitanes del Unicaja absoluto y del equipo que compitió en la Minicopa. El base internacional malagueño levantó el trofeo y lo mostró con una sonrisa a su afición, consciente de estar viviendo un bonito recuerdo dieciocho años después de la última Copa del Rey ganada por el conjunto cajista.
