Agentes de la Policía Nacional han desmantelado una organización criminal, asentada en la provincia de Málaga, dedicada al cultivo indoor de marihuana y han arrestado a dos de sus miembros como presuntos responsables de los delitos de tráfico de estupefacientes, pertenencia a grupo criminal y defraudación de fluido eléctrico.
Así, disponían de una nave en Manilva (Málaga) que habían acondicionado para el cultivo indoor. Sus miembros, familiares entre sí y residentes en las localidades malagueñas de Torremolinos y Fuengirola, habían instalado la plantación del estupefaciente lejos de sus domicilios, al objeto de dificultar las labores de investigación de la policía.
Esta actuación policial propició la detención de dos de sus miembros, efectuándose dos registros donde se intervinieron 985 plantas de marihuana, tres vehículos, 670 euros y documentación de interés para la investigación, ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.
Esta investigación, llevada a cabo por agentes del Grupo de Crimen Organizado de la Comisaría Local de Fuengirola, se centró sobre la posible existencia de una organización criminal, asentada en Fuengirola, que ofrecía sus servicios como cultivadores y distribuidores de marihuana.
En primer lugar, trataron de localizar la nave donde se estaría llevando a cabo la actividad ilícita. Tras varias pesquisas pudieron dar con ella, encontrándose bastante lejos de la residencia de los investigados. Todo apunta que el motivo de alejarla de sus residencias no era otro que dificultar las labores investigativas y la vinculación de los mismos a la actividad delictiva.
De igual modo, comprobaron que acudían al lugar al menos tres personas, que se encargarían del cuidado y mantenimiento de la plantación y posterior preparación de los envíos de droga. Además, en esta nave se preparaban las remesas para Holanda donde la red tenía ramificaciones encargadas de su comercialización, logrando así multiplicar sus beneficios.
La fase de explotación se materializó con un registro, efectuado días atrás, cuando las pesquisas evidenciaron que los investigados estaban preparando un envío de marihuana. En el registro de la nave los agentes comprobaron que los investigados habían modificado su estructura, abriendo una oquedad hacia los cimientos donde habían construido un sofisticado cultivo indoor.
Fueron intervenidas 985 plantas de marihuana. La instalación eléctrica que abastecía la plantación estaba enganchada de forma ilegal a la red de suministro eléctrico público.
La operación Fortaleza ha concluido con la desarticulación de este grupo criminal, en el que han resultado arrestados dos de sus miembros y la práctica de dos registros en los que se han intervenido 985 plantas de marihuana, tres vehículos, 670 euros y documentación de interés para la investigación. De todo lo actuado entiende el Juzgado de Instrucción número 3 de Estepona.
