Las máximas autoridades gubernativas de la Ciudad de la Justicia -el juez decano, la presidenta de la Audiencia Provincial de Málaga, y el fiscal jefe- han adoptado una resolución en la que, a partir de ahora, se limitarán las concentraciones y protestas de los funcionarios y sindicatos convocantes de la huelga en la Administración de Justicia dentro del interior de la Ciudad de la Justicia en Teatinos, una decisión que es consecuencia de los incidentes ocurridos durante la primera jornada de huelga el pasado 17 de abril.   En esa ocasión, coincidiendo con el paro de tres horas, entre las 10 y las 13 horas, un grupo informativo formado por delegados sindicales y funcionarios que secundaban la huelga, recorrieron las cuatro plantas de la principal sede judicial de Málaga, para explicar los motivos de la movilización y tratar de convencer a otros empleados para que se sumarán a la huelga.   En su recorrido utilizaron silbatos y bocinas y profirieron cánticos por los pasillos, produciéndose un momento de tensión con el juez decano, José María Paéz, que recriminó su conducta por la alteración de la actividad diaria del personal que había optado por no secundar la huelga. Uno de los sindicalista hizo sonar una bocina con fuerza cuando el magistrado salía de un despacho. Paéz se quejó ante los presentes de las molestías auditivas y, según fuentes judiciales, comunicó lo sucedido en el juzgado de Guardia.   Aunque los sindicatos lamentaron lo ocurrido, y decidieron al día siguiente realizar los piquetes informativos dentro del edificio sin utilizar ningún instrumento sonoro, las autoridades gubernativas han analizado los incidentes durante una reunión celebrada con la Gerencia de la Ciudad de la Justicia, la representante de Justicia del Gobierno de Andalucía, y mandos de la Guardia Civil, que vigilan los controles de acceso y del edificio.    Tras la misma se acordó por la representación de la judicatura y la Fiscalía que por los agentes del Instituto Armado "se impida que se vuelvan a producir estos hechos de ocupación del centro de trabajo y concentración de personas en el interior del edificio". Aluden para justificar la medida a la normativa que regula el derecho a huelga, "y ello con apercibimiento de delito de desobediencia a los responsables y sin perjuicio de la actividad que se desarrolle fuera" del edificio.      De este modo no se permitirán las concentraciones por la huelga de funcionarios dentro de Ciudad de la Justicia ni podrán realizarse ocupaciones de espacios con motivo de la protesta. Los sindicatos llegaron a utilizar también el salón de actos para informar a los trabajadores tanto de la plataforma reivindicativa como del seguimiento. Un espacio que también se utilizó por los letrados de la Administración de Justicia (LAJ) en la pasada huelga, recuerdan.