En primer lugar, Ibon Navarro ha indicado en la rueda de prensa celebrada en el Martín Urbano que “es una oportunidad para volver a competir contra un buen equipo, encima en su casa, donde juegan con ese punto extra de energía que les da el estar con su gente. Es un partido difícil, ya hemos visto lo que han sufrido los últimos rivales para ganar allí, y creo que es un partido difícil, importante y que nos va a exigir que tengamos un nivel de concentración alta”.
Preguntado por si existe algún tipo de superstición al ser el último encuentro antes de la Copa del Rey, el técnico ha expuesto que “más que superstición, lo importante son las sensaciones. El año pasado perdimos los dos partidos justo antes de la Copa del Rey, pero nos vinieron muy bien para aprender cosas. Está claro que la Copa está ahí a la vuelta de la esquina, pero es una victoria importante si queremos pelear por estar lo más arriba posible de cara a los Playoffs. La Copa del Rey es otra competición que no tiene nada que ver y lo importante es llegar con buenas sensaciones a nivel de detalles individuales, que estén bien físicamente. Eso es casi más importante que el hecho de ganar o perder antes de la Copa”.
Cuestionado por la posibilidad de que Jonathan Barreiro pueda disponer de minutos por primera vez tras su lesión, el técnico ha indicado que “creo que sí, veremos a ver, hay que hacer un descarte, pero en principio sus sensaciones son buenas. Está claro que tendrá que quitarse las telarañas del primer partido después de estar fuera 9-10 semanas, pero a nivel de entrenamientos está bien, físicamente está bien, no se va protegiendo la mano, por lo cual sí que está disponible. Tiene el alta médica, y en principio podemos contar con él”.
Con respecto al estado físico del resto de la plantilla, el preparador vitoriano ha ahondado en que “hay algún jugador que tiene un poco peores sensaciones después de las tres semanas de carga, pero creemos que va a llegar bien. Kendrick Perry tiene un problema en la muñeca y en el tobillo, que se hizo daño hace 10 días, pero va a ir un poco renqueante, y los demás creo que están en buena línea. Aún no con las piernas al 100%, pero todavía nos queda una semana para apuntalar esas cosas y llegar lo mejor posible la semana que viene”.
Por último, ha detallado que el Monbus Obradoiro “es un equipo que, precisamente, lo que les falta es ganar algún partido más para cambiar un poco la dinámica. Es un equipo que compite muy bien, pero les falta ese punto que muchas veces no tienes cuando llevas una mochila de derrotas. Pero se agarra a los partidos a base de cuestiones tácticas, te va eligiendo muy bien cómo y dónde atacarte... es un encuentro muy incómodo.
El partido en el Carpena se decidió en los últimos 4-5 minutos y ahora han sumado dos jugadores con respecto a aquel partido, Jordan Howard y Rigoberto Mendoza, que estaban llamados a ser importantes por su capacidad de anotar. Siempre sabes que, cuando juegas contra un equipo de Moncho Fernández, la preparación del encuentro es más costosa porque tiene muchas cosas. Hay que intentar hacer lo nuestro lo mejor posible, limitar en la medida de lo posible sus puntos fuertes, porque si no los controlas es un equipo que juega muy cómodo”.
