El Grupo Unicaja Banco obtuvo en los nueve primeros meses de 2015 un resultado consolidado de 209 millones de euros, un 24,4 por ciento superior a los 168 millones del mismo período de 2014. La compra de Ceiss por parte de la entidad financiera andaluza fue un factor positivo porque le ha permitido duplicar su dimensión, reducir los riesgos dudosos y mantener un elevado nivel de coberturas, reforzando de este modo su solvencia.
Esta positiva evolución se ha apoyado principalmente en las menores dotaciones, por la disminución del coste del riesgo, y en la bajada de los costes de explotación, efectos que más que compensan las reducciones en el margen de intereses y en los resultados de operaciones financieras.
Los datos más relevantes de la actividad hasta septiembre se asientan en la capacidad de generación de resultados, plasmada en la obtención de un margen básico (margen de intereses más comisiones) de 707 millones de euros.
La política de contención y racionalización de los gastos se ha traducido en una reducción de los gastos de explotación del 6 por ciento, situándose la cifra de eficiencia en el 45,9 por ciento. El computo de saneamiento y otros, por un importe de 260 millones de euros, determina la obtención de un resultado antes de impuestos de 272 millones.
Al cierre del tercer trimestre, el grupo Unicaja Banco, refuerza su posición de solvencia, con un CET1 o ratio de capital de primer nivel que aumenta desde el 11,0 por ciento en diciembre de 2014 hasta el 11,9 por ciento actual. Por su parte, la ratio de capital total se sitúa en el 12,1 por ciento.
En septiembre de 2015, el volumen de activos líquidos y descontables en el Banco Central Europeo suponía el 24 por ciento del total del activo consolidado y una ratio de préstamos sobre depósitos que mejora hasta situarse en el 79 por ciento. Y ello después de registrarse una disminución anual en los depósitos de los bancos centrales del 72,3 por ciento.