El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha asegurado que "si los datos así lo acreditan, si la carga de trabajo lo justifica, habrá una Sala de lo Penal desplazada en Málaga" del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), para lo que pedirán las estadísticas correspondientes.
Así lo ha asegurado este lunes Catalá en un encuentro-coloquio en el Colegio de Abogados de Málaga, al ser preguntado por el decano, Francisco Javier Lara, por este asunto; apuntando que "uno de los retos organizativos más importantes es, precisamente, instaurar la segunda instancia penal" a nivel nacional.
Al respecto, ha señalado que para poder hacer esta organización bien "hace falta información" tanto cualitativa, es decir, sobre la complejidad de los asuntos, como del número; por lo que ha insistido en que "la decisión que tomemos sobre dónde se crean las salas de lo penal de los tribunales superiores y con qué medios, derivará de datos".
Ha apuntado que "no vamos a tener una restricción presupuestaria" y que la decisión no está tomada "ni a favor ni en contra" de implantar esa sala desplazada en Málaga, señalando que se está estudiando y se tomará "cuando estén todos los datos encima de la mesa".
II PREMIO MIRAMAR
Catalá ha participado, también, junto a Lara, y al presidente de la Diputación, Elías Bendodo, en la entrega del Premio Miramar, que organizan el Colegio de Abogados y la Fundación Manuel Alcántara, y que en esta segunda edición ha correspondido a Hugo Aznar, doctor en Filosofía por la Universidad de Valencia y profesor de Ética de la Comunicación y de Historia del Pensamiento Político de la Universidad CEU Cardenal Herrera (Valencia).
Aznar, que es también director del Departamento de Ciencias Políticas, Ética y Sociología de la Universidad CEU Cardenal Herrera, ha obtenido el galardón por un artículo titulado 'Libertad de expresión: un valor esencial', publicado en el diario Levante el 10 de enero de 2015, en el que realiza un homenaje a las víctimas del atentado terrorista contra el semanario satírico Charlie Hebdo, que tuvo lugar en París y, en general, a todos los que son asesinados por ejercer este derecho fundamental.
El Colegio de Abogados de Málaga y la Fundación Manuel Alcántara organizan este certamen literario, que está dotado con un único premio de mil euros para el texto que, a consideración del jurado, ofrezca una mayor calidad literaria. El objetivo fundamental es el fomento de la creación literaria a partir de temas jurídicos.
El jurado de esta segunda edición ha estado formado por el ministro de Justicia, Rafael Catalá; el doctor en Ciencias Económicas y Empresariales Manuel Jesús Lagares, el periodista y director de proyectos y actividades de la Fundación Manuel Alcántara, Teodoro León Gross, y el decano del Colegio de Abogados malagueño.
Aznar, además, ha sido investigador principal de proyectos I+D+i del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad; miembro de la Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología de la FAPE --Federación de Asociaciones de Periodistas de España-- y ha publicado libros como 'Comunicación responsable. La autorregulación de los medios' (Ariel, 2005), 'De la democracia de masas a la democracia deliberativa' (Ariel, 2014), 'La Generación del 14' (Plaza y Valdés, 2016) o 'De la polis a la metrópolis' (Abada, 2015).
El ganador de la primera edición del Premio Miramar fue el letrado Javier Muriel por su artículo 'Que levante la mano', que fue publicado tanto en la edición impresa como en la web del periódico La Opinión de Málaga el 13 de noviembre de 2014.
