Usuarios nudistas de la playa del Guadalmar denuncian que el pasado fin de semana fueron relegados a un espacio “más lejano, donde no hay servicios públicos y de peor acceso” tras la instalación de una empresa de kitesurf. Además, hace dos días instalaron un cartel que prohibía el baño, provocando incluso enfrentamientos entre nudistas y practicantes de kitesurf, donde tuvo que intervenir la policía, según criticó este jueves el grupo Málaga para la Gente.
El portavoz, Eduardo Zorrilla, aseguró que con “esta cruzada de mentalidad retrógrada”, el equipo de Gobierno popular está en contra de sus propias ordenanzas. “El paseo, la estancia y el baño tienen preferencia en la playa sobre cualquier otro uso, sea naturista o no”, apuntó el responsable, que recuerda que la entonces Izquierda Unida promovió la creación de este enclave para los amantes del naturismo en los años noventa, única en todo el litoral de la capital.
Tras hacerse pública la polémica, la responsable de Playas, la popular Teresa Porras, defendió ayer que los movimientos en las delimitaciones de las playas nudista y de Kitesurf “no se han hecho de manera arbitraria y unilateral. Lo hemos consensuado con ambos colectivos ante la necesidad de tener que hacer estos cambios por la prohibición de AENA para la práctica del kitesurf en la zona anteriormente establecida”. Además, asegura que el nuevo espacio de la playa nudista cuenta con mejor accesibilidad ya que se ha instalado una pasarela peatonal de madera reforzada de 1.600 metros “se le ha dotado de duchas y cuenta con la intimidad que necesitan”.