Los médicos de familia y los pediatras de Málaga vivieron su primera jornada de huelga con optimismo. Así al menos lo puso de manifiesto durante la multitudinaria concentración llevada a cabo a las puertas de la Delegación de Sanidad de la Junta de Andalucía en Málaga el presidente del Sindicato Médico de Málaga (SMM), Antonio Martín que destacó, de entre los muchos motivos para la protesta tres fundamentales: La adecuación de las plantillas a las necesidades de la ciudadanía, es decir, que se pueda contar con el número de médicos que la cantidad de usuarios con los que cuenta la sanidad pública actualmente requiere, ciudadanos requiere; contar con tiempo suficiente para atender a cada paciente, ya que ahora en muchos casos, los facultativos son meros escribanos de recetas”, por último cobrar dignamente, es decir, tener un sueldo que se acerque al menos a la media nacional de los profesionales como en otras comunidades.
Por todo ello, casi medio centenar de personas, entre facultativos, no sólo de Málaga sino de otras provincias, apoyados por el colectivo de jubilados y de usuarios, se manifestaron en las puertas de la Delegación lanzando consignas como “Susana, escucha, Primaria está en la lucha”, “Sanidad pública y universal' 0 “Con la sala a reventar, no podemos trabajar”.
Desde la Junta, dos reacciones, por un lado, la propia consejera del ramo, Marina Álvarez que afirmó que respeta las reivindicaciones de los médicos de familia y pediatras pero que destacó que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) “está centrado sus esfuerzos” en este nivel asistencial y que “se están dando pasos importantes en este sentido”, y la del delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo que señaló que la Junta espera que “diálogo y esfuerzo” haga “recapacitar” a médicos para “no dañar” la sanidad con movilizaciones.
Ruiz Espejo insistió en que se aumentará el número de profesionales en Atención Primaria en la provincia.
Sin embargo, Martín insistió en que “tenemos un déficit crónico y permanente de recursos humanos y estructurales” e indicó que esta situación es más acentuada en la zona de costa, “que requiere una inversión importante ya que allí se concentra más población permanente no censada”. El presidente del Colegio de Médicos, Juan José Sánchez Luque, por su parte, reiteró la necesidad “de una segunda reforma de la Atención Primaria” y lamentó que “parece que cuando nos movilizamos nos responden, pero después eso queda en el olvido”. Para Luque, la medicina primaria vive una situación “de agotamiento y de desesperación” por ver “una vez y otra que clamamos por medidas, que muchas de ellas ya se habían aplicado en la década de los 80, y que la Administración no nos quiere oír y no quiere responder a nuestra demanda, en la que pedimos trabajar mejor por nuestros pacientes en el día a día”.
Sánchez Luque consideró que el incremento del cinco por ciento que dice el SAS “es parcial y no va a solucionar los problemas de los médicos que se han ido jubilando y de las vacaciones y sustituciones”.
Por último, el portavoz de Basta Ya, Carlos Bautista Ojeda destacó que a la presidenta andaluza, Susana Díaz, “le preocupa más tapar la huelga de los médicos que la salud de su población” en relación a unos servicios mínimos que consideran abusivos.
