Metro de Málaga, sociedad concesionaria de la Junta de Andalucía, dispone de bicicleteros en sus 17 estaciones y paradas, que facilitan la combinación del uso del metro con la utilización de la bicicleta. Esta medida ha supuesto la ampliación del área de influencia y la población beneficiada por el servicio del suburbano malagueño.
En total, la capacidad estacionamientos se eleva a 106 bicicletas, ya que todos los bicicleteros pueden albergar hasta seis unidades, salvo los de la estación Carranque, cuyo bicicleteros tiene capacidad para cuatro. Estas instalaciones están debidamente señalizadas, han señalado desde la Junta a través de un comunicado.
Se trata de una apuesta más por el uso del transporte público en combinación con otros modos de transportes no motorizados, como se propugna desde la Semana Europea de la Movilidad que se celebra en estos momentos, y que tiene como lema en este 2020 'Por una movilidad sin emisiones'.
El compromiso del metro de Málaga, adscrito a la Agencia de Obra Pública, con la intermodalidad ya quedó de manifiesto al permitir, desde el inicio de la explotación comercial, el acceso con bicicletas a las instalaciones del ferrocarril urbano.
Otro ejemplo de esto, han señalado, es la creación, en origen, del intercambiador modal de la estación El Perchel, desde donde se accede al AVE, a la red de Media Distancia, Regionales y Cercanías, así como a la central de autobuses interurbanos.
Los aparcabicicletas, que fueron colocados en colaboración con el Consorcio de Transportes del Área de Málaga, están ubicados en lugar seguro y cómodo para aparcar las bicicletas.
En concreto, en el caso de las doce estaciones subterráneas en el nivel de vestíbulo de las estaciones, una vez rebasada la línea de validación o torno, y en el caso de las cinco paradas en superficie en los laterales de las marquesinas.
Para comodidad de sus usuarios, metro de Málaga ha modificado su Reglamento de Regulación del Servicio, una vez aprobado por el consejo rector de la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía, en el que ha añadido las normas de uso de estas instalaciones y gracias a las cuales se puede acceder con bicicletas a todas las estaciones y paradas y subir la bici al metro, excepto en situaciones excepcionales como cuando se producen aglomeraciones.
