La Biblioteca Pública Provincial de Málaga ha sumado hasta el mes de septiembre un total de 49.728 usuarios, periodo en el que, tras reabrir el pasado junio al permanecer cerrada debido al estado de alarma por el COVID-19 y al igual que otras instalaciones, ha recuperado 14.739 usuarios.
En concreto, la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico reabrió el 17 de junio la Biblioteca Provincial de Málaga con medidas de seguridad y un tercio de su aforo. Desde ese día al 30 de junio acudieron un total de 1.884 usuarios, en el mes de julio un total de 3.983 usuarios; en agosto 4.218; y en septiembre 4.654.
Por meses, en enero se registraron 14.150 usuarios; en febrero 14.299; en marzo un total de 6.540, ya que permaneció abierta medio mes debido al estado de alarma, mientras que abril y mayo estuvo cerrada por el mismo motivo.
En cuanto a los préstamos, en enero fueron 3.577; un total de 3.930 en febrero; 1.804 en marzo, en abril y mayo no se registraron; en junio fueron 565; en julio 1.648; en agosto 1.865, y 1.572 en septiembre lo que hace un total de 14.961 en los primeros nueve meses del año.
En relación con el tipo de préstamos, los libros sumaron durante el citado periodo 12.473; los documentos audiovisuales, 1.889; los sonoros, 479; los documentos eléctricos, 75; y otros diez fueron de otro tipo de documentos.
Debido a la situación actual por el coronavirus la organización y las normas de uso de la biblioteca han cambiado, ya que, entre otros se necesita cita previa para el servicio de préstamos de libros a domicilio, se ha reducido los aforos en la sala de estudio y en la zona de ordenadores con acceso a Internet.
La colección de la Biblioteca Provincial es de aproximadamente 400.000 documentos. Así, 227.503 son ejemplares que forman parte de las colecciones de 2.303 títulos diferentes de periódicos y revistas; 149.604 libros; 11.800 unidades de carteles y postales; 7.563 películas y documentales; 5.156 unidades de documentos sonoros; 3.387 documentos electrónicos; 532 partituras de música; y 266 mapas.
BIBLIOTECA
La Biblioteca se crea a raíz de la desamortización de 1835 para recibir los fondos procedentes de los conventos. En un primer momento estuvo instalada en el Instituto de Enseñanza Media. Más tarde, en 1895 se dispone que sea servida por el Cuerpo Facultativo, con lo que se profesionaliza su gestión, siendo su primer director Lope Barrón y Ochoa, a quien sucede en el cargo el malagueño 'Poeta de la Raza', Salvador Rueda Santos.
En 1933 se inicia una segunda etapa, al trasladarse a un local independiente y céntrico --un piso alquilado en la Alameda-- y tomar el nombre de Biblioteca Popular Ricardo de Orueta. Más tarde, en 1937, vuelve a cambiar de nombre por el de Biblioteca Pública Cervantes.
En un informe redactado en 1939 se da cuenta de las lamentables condiciones en que se encuentra y se plantea realizar un proyecto de edificio. Así, el 29 de abril de 1956 se inaugura la Casa de Cultura, donde, junto con el Archivo Histórico Provincial, se instala la Biblioteca, en la que se integran los 8.000 volúmenes, al menos en parte, procedentes de los antiguos conventos.
A finales de 1994 la Biblioteca se traslada a un edificio provisional, acondicionado por la Junta de Andalucía, a quien le fue transferida la gestión de la Biblioteca. La antigua Casa de Cultura fue demolida para recuperar el Teatro Romano, descubierto al ser edificada.
Entre los servicios que cuenta la Biblioteca está la conservación de patrimonio bibliográfico y de la memoria provincial; préstamo de libros, lectores de libros electrónicos, acceso a eBiblio Andalucía, audiolibros, películas y música, entre otros; servicio de préstamo interbibliotecario; servicio público y gratuito de Internet y WiFi; servicio de Información Bibliográfica; organización de visitas guiadas; formación de usuarios; clubes de lectura; actividades culturales y de fomento a la lectura: asesoramiento a la Red Provincial de Bibliotecas Públicas; distribución de lotes de libros para las bibliotecas públicas y formación profesional a los bibliotecarios municipales.
