Agentes pertenecientes al Seprona de la Guardia Civil de Málaga, bajo la dirección y coordinación de la Fiscalía provincial de Medio Ambiente, han llevado a cabo en 2020 la denominada operación 'Deditio', donde se han realizado actuaciones en numerosos municipios contra el maltrato y abandono de animales domésticos, en las que se han investigado a 27 personas y se han intervenido y rescatado 96 animales.
Esta operación se encuentra enmarcada en la campaña #yosipuedocontarlo, lanzada por la Jefatura del Seprona de la Guardia Civil contra el maltrato y abandono animal, cuyo objetivo es concienciar a los ciudadanos para que promuevan las medidas necesarias en la protección y bienestar de los animales de compañía y denunciar las conductas de las que tuviesen conocimiento.
Se han llevado a cabo 106 actuaciones relativas a la inspección de perreras particulares, explotaciones ganaderas y núcleos zoológicos, en las que se han detectado más de 454 infracciones administrativas relativas con el bienestar animal, la falta de idoneidad de los alojamientos, la falta de alimentación y agua, la higiene, la falta de asistencia veterinaria o la carencia de registros documentales.
De las actuaciones llevadas a cabo, el instituto armado ha destacado en un comunicado "algunas conductas que suponían un grave peligro para la integridad física de los animales, llegando en algunos casos a provocarle la muerte, como es mantener a los animales en pésimo estado higiénico-sanitario, hacinados y con elementos peligrosos para los animales".
Además han apuntado también a la existencia de "animales desnutridos, sucios y con parásitos y otras enfermedades graves sin tratar por un veterinario, y otros sueltos en la vía pública, sin ningún tipo de control o vigilancia que pueden llegar a provocar incidentes graves con personas y otros animales o llegar a ocasionar accidentes de tráfico".
Desde la Guardia Civil han recordado que el propietario o poseedor de un animal tiene la obligación legal de mantenerlo en buenas condiciones higiénico-sanitarias y de proporcionarle alojamiento adecuado y asistencia veterinaria".
Durante el curso de las investigaciones se ha contado con la estrecha colaboración de veterinarios de varias oficinas comarcales agrarias (OCA) de la provincia, dependientes de la Delegación de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía en Málaga; del Colegio de Veterinarios malagueño y también con el apoyo de algunas asociaciones protectoras de animales.