El día 8 de Julio se cumple un año desde la desaparición de Mohamed El Maimouni Mohamed, tras el naufragio del barco Nuevo Rafael, en el que trabajaba, en Caleta de Vélez.

Ahora, en la localidad malagueña se ha convocado una concentración junto a la  lonja del puerto caleño con el que mantener vivo su recuerdo y acompañar a la familia, que sigue en su lucha porque se aclare qué pasó y por qué, tras el naufragio a 14 millas al suroeste de la Isla de Alborán, “tres de los tripulantes fueron rescatados, entre ellos un niño de 14 años hijo del propietario” pero, “desafortunadamente nuestro padre desapareció, y aún no ha vuelto a casa”, según indica en una carta firmada por una de las hijas, Fátima El Maimouni Alant, en nombre de toda la familia.

En la misiva, remitida a Viva Málaga, la familia recuerda que “la desaparición de nuestro padre y marido supuso un brusco y desconsolador cambio en nuestras vidas, como quisimos haceros saber, aun no podemos creer que ya no le tengamos en nuestras vidas, Dios le llevó en el momento menos esperado, y sin previo aviso. Se fue el pilar de nuestra casa, un luchador por nuestro sustento, por nuestro bien estar, nuestro protector, nuestro guía”.

Búsqueda pendiente y denuncias

También acusan a las unidades de SASEMAR, encargadas del rescate en el mar de “no haber puesto los medios necesarios”. La familia recuerda cómo dos semanas después de la desaparición, “pedimos al gobierno que siguiera buscando a nuestro padre, utilizando un ROV, para que pudiésemos tener su cuerpo de vuelta, y poder darle una digna sepultura”, por eso reiteran que “tan sólo pedimos, y les seguimos rogando que comprobasen si el cuerpo de nuestro padre estaba dentro de la embarcación Nuevo Rafael, no pedíamos que buscasen por todo el mar de Alborán, ya que nuestra sospecha desde un principio es que se quedó dentro sin poder salir, ya que él era un marinero muy experimentado, fuerte, ágil, gran nadador”.

En aquellos trágicos días hace ahora un año, “según versión de los náufragos, nuestro padre se encontraba en el interior de la embarcación cuando ésta se hundió”, pero la petición de la familia quedó en nada, pues no ha tenido los derechos de una persona, que se encontraba trabajando, ya 38 años cotizando como marinero en este país”, por eso, se preguntan: “¿esto merece un trabajador?, ¿esto merece su familia?”.

La misiva señala que el 13 de agosto del pasado año, interpusieron una denuncia al armador del barco por posibles negligencias, ya que aseguran, que el barco “tan sólo tenía permiso para trabajar en aguas costeras y se encontraba en alta mar”; también sospechan que “el niño menor de edad e hijo del armador del barco, pudiese estar conduciendo la embarcación en el momento del naufragio, ya que rescatamos videos que ellos mismos habían colgado en Instagram, donde el menor tripulaba la embarcación con asiduidad”.

Ahora, aseguran que “un año después esta denuncia se encuentra dando vueltas de un juzgado a otro, de Vélez-Málaga a Almería, de allí a Béjar, a Adra, vuelta a Vélez-Málaga” sin que aún haya “hay juzgado adjudicado, por lo cual no hemos podido luchar por los derechos de nuestro padre legalmente”.

La misiva familiar insiste en que “nosotros, desde hace un año, vivimos con gran frustración, con gran dolor, el no haber hecho todo lo que se podía por recuperar el cuerpo de nuestro padre, a pesar de haber intentado mover el corazón de algún político, de haber intentado que nuestro caso llegase a la justicia. Sin su cuerpo, es difícil para nosotros cerrar esta etapa”

Y finaliza con la firma de Hasnae Alanti, esposa de Mohamed; Fátima El Maimouni Alanti, hija mayor de 25 años; Kawtar El Maimouni Alanti, de 24 años; Moad El Maimouni Alanti, de 21 años; Mohamed El Maimouni Alanti de 19 años; Salma El Maimouni Alanti de 17 años, y estudiante de 1º de bachillerato, y Abdelssalam El Maimouni Alanti, de 13 años.