Así lo manifestó Amela en la Base Aérea de Torrejón de Ardoz donde aterrizaba el avión sobre las 14.30 horas con 80 españoles, 35 japoneses, 22 belgas y 8 brasileños a bordo, entre otras nacionalidades, además de un funcionario del Gobierno español, que les acompañó en el viaje.
Amela precisó que “sólo 34 personas han rechazado someterse a los controles voluntarios” que han efectuado en la Base una veintena de técnicos del Consejo de Seguridad Nuclear y del departamento de Sanidad Exterior a los viajeros, a su equipaje y al avión de Pullmantur”.