La cumbre internacional de paz sobre el conflicto sirio de 'Ginebra 2' se celebrará el 12 de diciembre, según ha informado este jueves el diario estatal sirio 'El Watan', que cita a fuentes diplomáticas en Francia.
En base a estas informaciones, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, habría dicho a su homólogo francés, Laurent Fabius, que el secretario general de Naciones Unidas Ban Ki Moon, anunciará la fecha el 25 de noviembre.
Fuentes gubernamentales sirias citadas por el diario han indicado que las conversaciones entre Damasco y Moscú para fijar dicha fecha continúan en marcha, así como los últimos preparativos de cara a la celebración de la cumbre.
En este sentido, han afirmado que los contactos con Rusia se están centrando en los detalles de procedimiento y la fecha de la misma. Asimismo, han recalcado la voluntad del Gobierno de participar en las conversaciones sin condiciones previas.
"La participación de Siria en 'Ginebra 2' tiene como objetivo principal detener al terrorismo y sus crímenes contra el pueblo sirio, así como la destrucción de infraestructuras en el país", han dicho.
Por último, han asegurado que las condiciones impuestas por la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria (CNFORS) para acudir a la cumbre "complican las cosas más de lo que ya lo están".
Entre estas condiciones están la entrega de garantías de acceso a las ONG internacionales a las localidades que se encuentran bajo asedio, la liberación de los presos políticos y el compromiso de que la conferencia desemboque en un proceso de transición política.
Estados Unidos y Rusia anunciaron en mayo de 2013 que celebrarían una nueva conferencia de paz en Ginebra (Suiza) para tratar de poner fin a la guerra que libran los rebeldes con las fuerzas gubernamentales. Después de sucesivos aplazamientos, se preveía que la cumbre se celebrara a finales de este mes, si bien podría ser postergada una vez más.
La conferencia de paz propuesta busca aprovechar un acuerdo de junio del 2012 entre las potencias mundiales que abogaba por la instauración de una autoridad transitoria con todos los poderes ejecutivos, pero no abordaba la cuestión de la posible participación del presidente, Bashar al Assad.