Al menos ocho supuestos insurgentes murieron y tres resultaron heridos en el bombardeo de un dron estadounidense en el área tribal de Waziristán del Norte, en el noroeste de Pakistán, informó a Efe una fuente oficial.
El ataque aéreo se produjo a mediodía local en el valle de Shawal cuando el avión no tripulado disparó dos misiles contra un edificio de un comandante insurgente uzbeko, dijo un portavoz del Gobierno local, Rab Nawaz.
Se trata del primer ataque con un dron estadounidense del año en el país asiático después de que se reanudaran los bombarderos con este tipo de aviones en junio pasado, tras seis meses de inactividad y coincidiendo con una ofensiva del Ejército paquistaní en las áreas tribales.
Ayer 31 supuestos insurgentes murieron en bombardeos del Ejército en Tirrah, en la región tribal del noroeste de Khyber, en un ataque en el que fueron destruidos cuatro refugios insurgentes y un centro de entrenamiento de atacantes suicidas, de acuerdo con un comunicado del servicio de comunicación militar de Pakistán (ISPR).
Las habituales muertes de civiles crean una gran controversia sobre este tipo de bombardeos con aviones no tripulados, condenados a menudo por el Gobierno del país islámico por considerarlos una violación de su soberanía.
Según la organización New America Foundation, los ataques con dron han causado desde 2004 entre 2.000 y 3.500 muertos en Pakistán, un 10 % de ellos civiles.
