Al menos veinte combatientes del grupo yihadista Estado Islámico (EI) murieron hoy por los bombardeos de la coalición internacional, liderada por EEUU, en la provincia de Al Hasaka, en el noreste de Siria, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Aviones de la alianza internacional lanzaron un total de diecinueve ataques contra posiciones de los radicales en la localidad de Al Shadadi, en el sur de Al Hasaka.
En esos mismos bombardeos, al menos un civil perdió la vida por las heridas sufridas a causa de los ataques aéreos.
Por su parte, las fuerzas del régimen de Bachar al Asad dispararon proyectiles de artillería contra áreas bajo el control de los extremistas en el sur de Al Hasaka, donde por el momento no ha habido ni muertos ni heridos.
Mientras, en Tal Tamr, en el norte de la misma provincia, los miembros del EI se enfrentan a las Unidades de Protección del Pueblo, milicias kurdo sirias, en unos choques donde se ha registrado un número indeterminado de bajas en ambos bandos, agregó el Observatorio.
El EI proclamó un califato a finales de junio en Irak y Siria, donde ha tomado partes del norte y el centro de ambos países.