Estados Unidos declaró hoy el fracaso del acuerdo nuclear alcanzado con Irán en 2015, un pacto del que estudia retirarse pese a haber reconocido que Teherán está cumpliendo con sus compromisos.
Al mismo tiempo, advirtió de que el país persa podría seguir los pasos de Corea del Norte "y llevarse consigo al mundo".
Después de esquivar el tema durante sus primeros meses en el poder, el presidente estadounidense, Donald Trump, parece haberse decidido a afrontar el futuro del que definió durante la campaña electoral como "el peor acuerdo jamás alcanzado", el suscrito entre Irán, Estados Unidos y otras cinco potencias en 2015.
"El JCPOA (como se conoce el acuerdo multilateral) fracasa a la hora de conseguir el objetivo de un Irán no nuclear. Solamente retrasa su fin de convertirse en un Estado nuclear", aseguró hoy el secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, en una conferencia de prensa.
Anteriormente, a última hora del martes, Tillerson había enviado una carta al presidente de la Cámara de Representantes de EEUU, el republicano Paul Ryan, en la que certificaba que Irán "está cumpliendo con sus compromisos" bajo el acuerdo nuclear.
Desde la firma del acuerdo nuclear, el Departamento de Estado debe informar al Congreso cada 90 días sobre si Irán está cumpliendo con sus obligaciones bajo el pacto multilateral, suscrito también por Francia, Reino Unido, Alemania, Rusia y China.
Tillerson aprovechó la primera notificación de ese tipo bajo el mandato de Trump para anunciar que el mandatario "ha ordenado una revisión" del acuerdo, dirigida por el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca y que, según precisó hoy el portavoz presidencial, Sean Spicer, durará "90 días".
Esa revisión "evaluará si la suspensión de sanciones" relacionadas con el programa nuclear de Irán, a la que Estados Unidos y la Unión Europea (UE) accedieron a cambio de la imposición de límites a distintas actividades atómicas iraníes, "es vital para los intereses de seguridad nacional" estadounidenses.
"El acuerdo realmente no cumple su objetivo. Consiste en sobornar a una potencia que tiene ambiciones nucleares durante un periodo corto de tiempo, y después otra persona tiene que lidiar con ello más tarde", afirmó hoy Tillerson en referencia a los plazos de entre 10 y 25 años contemplados en el pacto nuclear.
"Éste acuerdo representa la misma táctica fallida del pasado que nos llevó a la amenaza inminente actual que tenemos en el caso de Corea del Norte. El Gobierno de Trump no tiene ninguna intención de pasarle la pelota de Irán a una futura Administración" de EEUU, subrayó el jefe de la diplomacia estadounidense.
Tillerson advirtió de que "un Irán sin restricciones tiene el potencial de seguir el mismo camino que Corea del Norte y llevarse consigo al mundo".
En un momento de fuertes tensiones con Pyongyang, Tillerson dejó claro que el fin de la doctrina estadounidense de la "paciencia estratégica", declarado en el caso de Corea del Norte por el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, se aplica también a la política hacia Irán.
El titular de Exteriores estadounidense, muy poco dado a comparecer ante la prensa, llegó incluso a aceptar preguntas después de su declaración sorpresa sobre Irán, y citó una larga lista de las "alarmantes y continuas provocaciones" de Irán.
En concreto, señaló que Irán es el "principal patrocinador del terrorismo del mundo, responsable de intensificar múltiples conflictos y de socavar los intereses de EEUU en países como Siria, Yemen, Irak y el Líbano".
"Las pruebas están claras: las acciones provocativas de Irán amenazan a EEUU, la región y el mundo", sentenció Tillerson.
Pese a esa fuerte retórica, retirarse del acuerdo con Irán sería complicado y Trump podría decidir que, en último término, no le conviene abandonar un pacto que llevó años negociar y que parece estar funcionando, algo que además presentaría problemas para las otras potencias participantes, según apuntan varios analistas.
"Trump no solo se arriesga a deshacer uno de los logros de seguridad nacional más significativos en décadas, sino también a destrozar la credibilidad de EEUU en futuras negociaciones internacionales", dijo en un comunicado el presidente de la organización Consejo Nacional Iraní-Estadounidense, Trita Parsi.