"Este ataque bárbaro ha ocasionado la muerte de 35 víctimas civiles, la gran mayoría mujeres", informó el presidente burkinés, Roch Kaboré
Al menos 35 personas, la mayoría de ellas mujeres, y 7 militares han fallecido hoy en un ataque terrorista contra un destacamento militar en la región del Sahel, en el norte de Burkina Faso, en el que han muerto también ochenta yihadistas, informaron fuentes militares y la Presidencia.
"Este ataque bárbaro ha ocasionado la muerte de 35 víctimas civiles, la gran mayoría mujeres", informó el presidente burkinés, Roch Kaboré.
Se trata de un ataque "terrorista" contra el destacamento desplegado en Arbinda, una localidad del Sahel, en el extremo norte del país, según señaló una fuente militar a Efe que pidió el anonimato.
La respuesta de los gendarme y las fuerzas armadas, con apoyo aéreo, ha permitido "neutralizar a 80 terroristas", según un comunicado del Estado Mayor del Ejército al que ha tenido acceso Efe.
De la parte del Ejército burkinés han fallecido siete militares y ha habido varios muertos, y además las fuerzas armadas se han incautado de un centenar de motos, armas y munición.
Además, "se contaron varias víctimas civiles", especifica el comunicado que no precisa cifras, ya que aún se está reconociendo la zona.
El ataque se ha producido en la provincia de Soum, una zona limítrofe con Malí, que sufre en los últimos meses constantes ataques yihadistas, y es también la provincia natal de Ibrahim Dicko, alias "Malam", creador del primer grupo terrorista Ansarul Islam.
Malam murió en 2016, pero su grupo sigue actuando en la región.
El terrorismo en este país de África occidental comenzó en abril de 2015, cuando miembros de un grupo afiliado a la red Al Qaeda secuestraron a un guardia de seguridad rumano en una mina de manganeso Tambao, en el norte del país, que aún sigue desaparecido.
Desde entonces ha ido en aumento el número de ataques atribuidos a grupos afiliados a Al Qaeda y al Estado Islámico (EI).
La región más afectada por esta creciente inseguridad es la del Sahel, situada en el norte y que comparte frontera con Malí y Níger, siendo un foco habitual de ataques armados y secuestros.
Pero también ha habido ataques en otras zonas; de hecho en la provincia este, Burkina sufrió su peor ataque en noviembre, cuando hombres armados emboscaron un convoy de vehículos donde viajaban trabajadores de una mina canadiense y murieron 37 personas.
Burkina Faso es uno de los cinco países que componen la fuerza transfronteriza conjunta G5 Sahel -junto a Mali, Mauritania, Níger y Chad- con el objetivo de combatir el terrorismo yihadista en la región.