La Guardia Civil ha detenido a un hombre de 57 años, con antecedentes policiales, después de que al intentar atracar, armado con una navaja y una pistola, a los propietarios de un cortijo en Santa Fe (Granada), acabara herido grave tras ser apuñalado en el pecho con su propia navaja a manos de los moradores de la vivienda.
La Guardia Civil también ha detenido a las supuestas víctimas del robo, un hombre de 67 años y su hijo de 30, éste último con antecedentes policiales, como presuntos autores de un delito de lesiones graves, según informa en una nota la Guardia Civil.
Los hechos sucedieron el pasado 13 de octubre por la tarde, cuando el presunto atracador ocultó la matrícula de su coche con cinta adhesiva; se puso guantes de látex y un pasamontañas, y armado con una navaja de grandes dimensiones en una mano y en la otra una bolsa de tela donde ocultaba una pistola ametralladora, llamó a la puerta del cortijo.
Lo que no esperaba fue la reacción de los moradores de la vivienda, con los que tuvo un forcejeo y que finalmente le apuñalaron con su propia navaja.
Los propietarios del cortijo alertaron a la Guardia Civil de que tenían retenido al hombre y cuando la patrulla llegó, se encontró con una persona sentada en el suelo y mucha sangre en la cara, en el suelo y en sus ropas. Al examinarlo comprobaron que tenía una herida abierta en la cabeza y otra a la altura del pulmón izquierdo.
Los agentes solicitaron una ambulancia y el herido fue evacuado al hospital Virgen de las Nieves de Granada, donde permanece ingresado y custodiado por la Guardia Civil tras ser detenido como presunto autor de un delito de robo con violencia en grado de tentativa y otro de tenencia ilícita de armas.
Al realizar la inspección ocular, la Guardia Civil localizó junto al coche del detenido una bolsa de deporte y dentro una pistola ametralladora marca Astra, de calibre 9 milímetros cargada con 10 cartuchos.