El Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada implementa en su nueva unidad de pared abdominal una técnica que permite tratarlas por laparoscopia
El Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada ha implementado en su nueva unidad de pared abdominal una técnica que permite tratar hernias inguinales de difícil abordaje mediante laparoscopia, una intervención menos invasiva que acelera la recuperación del paciente.
El coordinador de la unidad, Alfonso Mansilla, ha explicado a Efe que esta técnica permite dar solución a pacientes que antes no contaban con un abordaje eficaz para su dolencia o no era el más adecuado y que al utilizarse la laparoscopia que hasta ahora no se ofrecía, se reduce el dolor y el tiempo de recuperación.
"Esta nueva técnica permite la colocación de una malla sin necesidad de una cirugía convencional y tiene como beneficios menor dolor en el paciente, una recuperación más rápida, descubrir incluso algunas hernias que no se veían de manera previa y que a la semana se puedan incorporar a sus empleos", ha añadido el doctor José Luis Díez, de la misma unidad.
El equipo de la nueva unidad del Virgen de las Nieves, formado por seis especialistas, se ha formado para ofrecer alternativas a pacientes de Andalucía Oriental gracias a una técnica con "una larga curva de aprendizaje".
Esta técnica permite colocar la malla en una intervención de unos 40 minutos que en breve podrá hacerse como cirugía ambulatoria.
En un mes, el equipo de especialistas ha intervenido a quince pacientes con hernia inguinal de Granada, Jaén y Almería de manera completamente extraperitoneal.
La hernia inguinal es una dolencia con una alta incidencia en la población que afecta el doble a hombres que a mujeres y que resulta compleja de tratar en pacientes con intervenciones quirúrgicas abdominales previas.
La unidad de Pared Abdominal aborda también otras dolencias como las hernias derivadas de una histerectomía de colon o deformidades en la pared en pacientes con una alta morbilidad.
Trabajan además con un equipo multidisciplinar formado por anestesistas, digestivos, nutricionistas, neurofísicos y personal de radiodiagnóstico para utilizar mallas de alta tecnología, sin necesidad de puntos de sutura, que mejora la capacidad respiratoria y reduce el dolor en determinados pacientes.
También tratan hernias inguinales o deformaciones postoperatorias que generan dolor crónico gracias a esta nueva técnica que "saca del limbo" a pacientes que hasta ahora no tenían un tratamiento.
En este caso, trabajan con la unidad del dolor con una cirugía de rescate que permite a pacientes jóvenes, en edad laboral pero de bajas prolongadas o definitivas por las secuelas de las hernias, incorporarse a una vida normalizada.
"La nueva unidad sirve para hacer un mapeo de pacientes que hasta ahora no contaban con la técnica adecuada y ahora podrán mejorar gracias a un equipo multidisciplinar y el apoyo del hospital, porque las mallas son más caras y se ha requerido una formación", ha añadido Mansilla.