La empresa Aqualia, actual concesionaria del servicio de agua en Puente Genil, ha emitido un comunicado de prensa en el que reitera que el contrato de concesión suscrito con el Ayuntamiento para la gestión del servicio municipal de abastecimiento y saneamiento de agua, y que en teoría expira a finales del presente año 2021, muestra que la finalización del mismo ha de comunicarse con un año de antelación a la empresa, “y que de lo contrario se entenderá que se prorroga tácitamente cinco años más”.
En su comunicado, Aqualia dice que informó al Ayuntamiento de que este aviso no se había producido cuando tuvo conocimiento del decreto que el Alcalde dictó el 26 de mayo de 2021 para “tramitar el procedimiento conducente a la determinación del modo de gestión más eficiente y sostenible”, indicándole que al no existir ningún acuerdo expreso aprobado por el Pleno oponiéndose a la prórroga, el contrato no se había extinguido, sino que se encontraba prorrogado automáticamente hasta diciembre de 2026”.
“A pesar de que, como ha indicado el alcalde, la ley de Contratos del Sector Público sufrió modificaciones en 1999 referentes a la eliminación de las prórrogas tácitas, dichas modificaciones no tienen carácter retroactivo, y por lo tanto no son aplicables al caso de Puente Genil, al tratarse de un contrato de 1996, tal y como así lo avalan diversas sentencias favorables para Aqualia en situaciones similares. Además, Aqualia no entiende las declaraciones del alcalde en las que justifica pasar la gestión a Emproacsa argumentando un supuesto servicio deficiente, cuando la empresa no tiene registradas reclamaciones de ciudadanos sobre el servicio prestado, ni ha recibido quejas del Ayuntamiento en este sentido en los últimos años”, indica el comunicado de la empresa.
Del mismo modo, la empresa cita los resultados de una reciente encuesta ciudadana, publicada el pasado mes de octubre -en este periódico- sobre intención de voto, que valoraba tanto a dirigentes políticos como la prestación de servicios públicos, y que ponía de manifiesto que el del agua era el mejor valorado con un 87,7% de los encuestados que se consideraba entre muy satisfecho y bastante satisfecho. “Teniendo en cuenta lo anterior, Aqualia teme que, no existiendo argumentos objetivos para un traspaso del servicio de agua de Puente Genil a manos de Emproacsa, la motivación del alcalde pueda deberse a razones políticas, al compaginar la alcaldía del municipio con la presidencia de esta entidad pública provincial”.
En su comunicado, la empresa además muestra su preocupación por el futuro de sus empleados, “dado que ya hubo un precedente similar a este en otro contrato, donde Emproacsa justificó en vía judicial que no podía subrogar a los trabajadores de Aqualia cuando finalizó la gestión del servicio y éstos acabaron perdiendo su empleo”. “A esto se suma que Puente Genil dispone de tarifas de agua muy inferiores a las de la gran mayoría de los pueblos del entorno, incluidos aquellos gestionados por Emproacsa. Esto apoyaría la opinión del 53,7% de los vecinos que en la anteriormente mencionada encuesta ciudadana señalaron que, si se produjese el cambio a Emproacsa, no creían que eso fuera a influir positivamente en su día a día”.
Por otra parte, Aqualia también ha querido defender en la nota de prensa su “implicación y profesionalidad” a la hora de prestar el servicio en Puente Genil como empresa especializada en la gestión del ciclo del agua. Su presencia en más de 90 municipios andaluces prestando servicio a 2,3 millones de personas “son prueba de su experiencia y liderazgo en el sector”.
Por último, la compañía confía en que el Ayuntamiento opte finalmente por la continuidad de Aqualia en el contrato, que permitiría al municipio ejecutar nuevas inversiones asociadas a esta nueva prórroga, para lo que ya se ha puesto a disposición del Ayuntamiento.
“Estas inversiones son muy necesarias para la mejora de la calidad del servicio y el confort ciudadano, tal como se pudo comprobar con la construcción del nuevo depósito San Pancracio, actuación acometida gracias a la última prórroga de Aqualia, que resolvió los problemas de cortes y falta de presión de agua”.
“Además -apunta la compañía- la permanencia de Aqualia en el municipio, permitiría a los pontaneses mantener los beneficios que una gran empresa aporta al servicio, tales como una oficina virtual, teléfono gratuito de atención al cliente 24 horas 365 días, app para la realización de gestiones, oficina presencial en el municipio con apertura diaria, y todo el conocimiento técnico necesario para continuar con el trabajo en la reducción de pérdidas de agua en la red de abastecimiento, que sigue necesitando de estas nuevas inversiones para aumentar su rendimiento y que son fundamentales desde un punto de vista medioambiental”.
El comunicado finaliza indicando que “teniendo en cuenta lo anterior, Aqualia espera que no sea necesario acudir a la vía judicial para defender el cumplimiento del contrato por parte del Ayuntamiento, a lo que se vería obligada en caso de que éste no cesase en su empeño de traspasar el servicio a Emproacsa”.
