La Sexta estrenó anoche la segunda temporada de The walking dead
La Sexta ha estrenado esta semana la segunda temporada de la esperada The walking dead cuando ya se llevan emitidos seis de los trece episodios que componen la misma en Estados Unidos y en el canal Fox español. Sin embargo, la expectación con que se ha promocionado el regreso de la serie puede provocar más de una decepción entre sus seguidores por su peligrosa tendencia a caer en el aburrimiento y en la reiteración de situaciones y diálogos. De hecho, ya hay foros en internet en los que se arremete duramente contra los guiones de los nuevos capítulos y la sensación de sopor que ha transmitido la mayoría de ellos, y, en especial, el de esta semana, el sexto, sin apenas tensión narrativa y completamente prescindible, incluida la parrafada-discusión final entre el sheriff y su esposa con el tema del aborto como telón de fondo.
Lo cierto es que poco va quedando de los grandes logros de la temporada inaugural -de tan solo seis episodios, los mismos que lleva hasta ahora la segunda-, sobre todo en lo referente al sentido de desesperanza de la sociedad del bienestar que consolidaba la trama de terror apocalíptico que daba curso a los hechos. Todo lo ocurrido hasta ahora hubiera cabido en dos episodios, y lo peor de todo es que su creador y guionista ya ha reconocido que ni la serie ni el cómic tienen final cerrado, sólo el que marque el negocio.