Las Vegas, conocida como la ciudad del pecado y por ser la capital del entretenimiento, se engalana para presenciar hoy una corrida de toros por primera vez desde 1965, con el español Julio Benítez El Cordobés hijo como reclamo y la peculiaridad de que no habrá derramamiento de sangre.

Hace más de cuatro décadas que la ciudad no vive un evento como el organizado entonces por la empresa International Bullfights, cuya intención era promover el turismo en las ciudades mexicanas de Guadalajara y Puerto Vallarta.

Y, como ocurrió aquella vez, los animales no recibirán muerte debido a las leyes estatales de Nevada. En la faena de este lunes, organizada dentro del complejo ecuestre del hotel South Point –con capacidad para 4.400 personas– como parte de las Fiestas Patrias del Día de la Independencia en México, también actuarán los mexicanos Eulalio López El Zotoluco y Alejandro Amaya.

Las corridas se repetirán el martes, con el protagonismo de los rejoneadores Joao Salgueiro, José Luis Rodríguez y Jorge Hernández Gárate, y durante los últimos cuatro días de septiembre, cuando acudirán nombres ilustres del toreo como José Ortega Cano, Enrique Ponce, Javier Conde, Julián López El Juli, David Fandila El Fandi y Francisco Rivera Ordóñez.
 
“Estamos entusiasmados de ofrecer corridas de toros sin sangre en Las Vegas y contentos de celebrar nuestro primer evento como parte de los festejos del Día de la Independencia en México”, explicó Pedro Haces, presidente de la compañía organizadora del evento, Don Bull Productions.