El escritor alicantino Rafael Balanzá obtuvo ayer el premio de Novela Café Gijón 2009 con Los asesinos lentos, una novela que destaca por su “audacia narrativa” y su “construcción” y que se inicia con el drama de un hombre acuciado por los miedos de la vida cotidiana, según destacó el jurado.

Una novela que, en palabras del ganador, tiene muchas influencias de Kafka, que es el autor que más admira.

“Toda la novela está en la primera frase y su desarrollo depende de ella hasta el final”, explicó el flamante ganador tras escuchar el fallo del jurado en el Café Gijón, el madrileño café literario por excelencia.

“Te voy a matar” es la primera frase del libro y es lo que le dice Valle a Juan Cáceres, dos amigos de juventud con vidas muy distintas.

Una amenaza de muerte que dura hasta el final y una trama que a los miembros del jurado les ha parecido “muy audaz”, calificativo que Balanzá ha agradecido mucho pero con el que no se ha mostrado muy de acuerdo.

“Para mí es un elogio –dice el autor–, pero la verdad es que yo no me siento muy audaz. Soy más bien un escritor clásico al que no le gustan los experimentos vacuos. Todo ya está inventado”.