La venerada imagen de Jesús Nazareno de Pasión, de la iglesia del Carmen, una talla de enorme belleza y antigua, permaneció en devoto besamanos durante el Miércoles de Ceniza y el primer jueves de Cuaresma, y el viernes, fue situado sobre una parihuela, desde la que presidió el primer Vía Crucis de la Cuaresma de San Fernando, en el interior de la iglesia del Carmen, igual que es costumbre que el crucificado del Cristo de la Salud, presida el Vía Crucis del Viernes de Dolores en el interior del templo y claustro del convento.
Manuel David Anelo Herrera nos ofrece imágenes del besamanos y destalles captados en la iglesia conventual del Carmen.