No amaneció mejor día para que los Copatronos de la ciudad, San Servando y San Germán, procesionaran desde la iglesia de Buen Pastor hasta la ermita del Cerro de los Mártires, aunque la iglesia está apuntalada por su situación estructural que se encargaban de hacer ver la comisión que busca rescatar el edificio del derrumbe al que está abocado si no se actúa y pronto. Tenían instalada una barra en la explanada para recaudar fondos.
A las once de la mañana salió la parihuela con los santos camino del Cerro, portada por los vecinos y con un grupo rociero acompañándolos durante todo el camino. Y una vez subida la cuesta tuvo lugar la misa al aire libre.
Mientras tanto desde el principio de la mañana había tenido lugar las actividades organizadas por la Universidad de Cádiz sobre la riqueza arqueológica de la zona, que fueron explicando a quienes acudieron a la cita mientras en la explanada comenzada al mediodía las actividades en la carpa instalada para atender a los más pequeños.
También los scout del Grupo Scout Eryteeia estuvieron presentes en la celebración y al otro lado del Cerro, en la Asociación Hípica La Isla, se desarrollaban distintos concursos ecuestres.
Lo mejor, precisamente por el magnífico día, fue la presencia de muchas familias dispuestas a pasar el Día del Cerro como tradicionalmente, con la comida llevada de casa y a la sombra.