El Centro de Exposiciones y Congresos de San Fernando ha acogido este martes la primera sesión de evaluación de la iniciativa Construyendo Barrios Violetas, que se puso en marcha en la ciudad el pasado mes de noviembre y que quiere dotar al municipio de una nueva herramienta para luchar contra la desigualdad y una de sus principales y más graves consecuencias, la violencia de género.
La concejal de Mujer, Virginia Barrera, ha sido la encargada de presidir esta sesión de trabajo en la que han participado una decena de representantes de la más de una veintena de entidades vecinales y de colectivos sociales como Cruz Roja o los que trabajan con las personas sin hogar que recibieron la formación para convertirse en agentes de cambio en la sociedad y así avanzar en la erradicación de la violencia machista en San Fernando.
Esta sesión de análisis y evaluación ha servido sobre todo para la puesta en común de experiencias y del trabajo desarrollado en estos meses por estas mediadoras sociales de los barrios violetas gracias a las capacidades adquiridas en la formación. Así, se han analizado algunos de los casos atendidos o detectados en primera instancia por estas agentes, que suman una decena, y que ya se han derivado a los servicios correspondientes para su atención especializada.
Del mismo modo, la edil de Mujer ha recordado que esta iniciativa continuará en los próximos meses con nuevas formaciones, así como acciones que han sido reclamadas por las mismas participantes del programa en la sesión de evaluación.
Así, entre las principales conclusiones del encuentro de este martes se encuentran la petición de reuniones itinerantes por las diferentes barriadas y colectivos para coordinar el trabajo en red. Como ha resaltado Barrera, “hoy hemos comprobado de forma fehaciente que el trabajo conjunto funciona, que las experiencias de unas sirven a otras, y que juntas avanzamos más en este trabajo iniciado para erradicar la violencia machista”.
No en vano, uno de los principales objetivos de esta iniciativa ha sido desde el inicio fomentar la cohesión y que se creen sinergias positivas entre las diferentes asociaciones en este ámbito, y que se cree un espacio de reflexión sobre este tema.
De la sesión también ha emanado la propuesta de celebrar un Congreso sobre Violencia de Género en torno al 25 de Noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
En cuanto a las peticiones de formación específica, se han centrado en la necesidad de instruir sobre la violencia institucional en este ámbito, y en aspectos como la trata de personas y la prostitución. En palabras de la edil, “la evaluación de hoy y sus resultados, que tenemos que analizar, nos van a ayudar a diseñar este nuevo programa formativo dentro de la iniciativa Construyendo Barrios Violetas, ampliando conocimientos de forma continua para darles más recursos, habilidades y herramientas que les permitan continuar con esta importante labor”.
La concejala de Mujer ha puesto de relieve que “la puesta en común del trabajo que se ha realizado en los últimos meses ha sido muy positiva, y hemos podido comprobar qué es lo que mejor ha funcionado en la formación y su posterior puesta en práctica, y qué se puede desechar. Es sin duda un paso más en esta labor tan importante en lo que respecta a la sensibilización y la visibilización frente a la violencia machista, una lacra que sigue golpeando y que nos demuestra que hay que seguir trabajando en esta línea”.
Barrera ha recordado que desde el Ayuntamiento se busca que “toda la sociedad se implique en la lucha contra esta lacra” y, sobre todo, “que las mujeres sean conscientes de que entre unas y otras nos podemos ayudar, que exista esa sensibilidad, la complicidad, que ellas tengan la capacidad de poder detectar en sus entornos, en las calles, en sus barrios alrededor del colectivo, de la asociación de vecinos, que hay mujeres que están siendo víctimas de violencia, que están siendo maltratadas. Y que estas a su vez sepan dónde encontrar una salida”.
Formación especializada
La formación impartida ya en el marco de esta iniciativapara construir barrios violetas, por parte de una empresa especializada y que se trabajó teniendo en cuenta los intereses y las realidades cotidianas de las personas participantes, ha permitido que todas las participantes pudieran adquirir recursos para poder detectar problemáticas relacionadas con la violencia machista, reflexionar sobre ellos, cuestionar aspectos como los roles sexistas y construir alternativas que permitan entornos más igualitarios.
Así, durante la jornada se conocieron las causas y características de la violencia de género; se realizó un análisis crítico desde la perspectiva de género que permita comprender cómo sigue habiendo una legitimación de la violencia de género por una parte de nuestra sociedad; se aprendió a detectar indicadores de violencia de género; se desarrollaron habilidades para la acogida de casos de la violencia de género; se obtuvieron pautas de actuación para saber cómo abordar este tipo de casos; y también se conocieron la labor y las competencias de todas las instituciones que intervienen en los casos de la violencia de machista.
La primera de las ponencias se tituló Barrios violetas, para la prevención y afrontamiento de las violencias machistas, y realizó una conceptualización básica en torno a la violencia de género así como de visibilizar la importancia del papel que tienen las asociaciones en la erradicación de esta lacra social.
Después, con el grupo dividido en dos, se llevó a cabo el taller Herramientas para la detección de la violencia de género en nuestro entorno, una actividad formativa interactiva, dinámica y práctica.
En la sesión de tarde, las jornadas se retomaron con el taller Habilidades para el acompañamiento de mujeres en situación de violencia de género, con el alumnado de nuevo dividido en dos grupos.
Finalmente, se dedicó la última parte a la elaboración de conclusiones extraídas del desarrollo de los talleres.
